viernes. 19.04.2024

La arquitecta murciana Mónica Martínez Vicente revoluciona el sector funerario con su proyecto Memoory, que aplica conceptos de la neurociencia  en concreto de la neuroarquitectura en los cementerios, los grandes espacios urbanos olvidados, donde más sensaciones de rechazo y negatividad se producen, para devolver a la sociedad la naturalidad con la que los antepasados homenajeaban a los suyos.

 

Memoory crea despedidas con amor, más personales y únicas que implican desde el funeral, el diseño del espacio donde vamos a permanecer para siempre hasta la gestión postmortem y el acompañamiento social al duelo. Servicios funerarios alternativos adaptados a los cambios socioculturales que se están produciendo en todos los ámbitos y basados en la tendencia a la incineración  que permite más versatilidad a la hora de “enterrarnos”.

 

"Nuestras lápidas reflejan la personalidad y la estela de nuestro paso por este mundo a través del diseño y los materiales, poniendo en valor nuestra vida", señala Mónica Martínez. "Convertirnos en recuerdos bonitos nos ayuda a  comenzar el proceso del duelo más aliviados y hace que nuestra visita al cementerio sea un momento más emotivo y especial, se genera un vínculo más positivo con ese lugar recordando lo feliz de su vida» añade la arquitecta.

 

"No podemos cambiar el final de nuestras vidas pero sí la manera de despedirnos, de descansar eternamente y de afrontar la pérdida de nuestros seres queridos», comenta la innovadora empresaria junto a la lápida del árbol de naranjo que realizó para un familiar, imaginando que él estaría feliz descansando para siempre.

La arquitecta murciana Mónica Martínez Vicente revoluciona el sector funerario