viernes. 29.03.2024

 

El Centro de Cualificación Turística (CCT) celebra mañana lunes la segunda jornada del ciclo ‘Re-evolucionando la sala’, que estará dedicada al marketing gastronómico y su utilidad para aumentar ventas en el negocio de la hostelería.

 

La jornada estará conducida por la directora de la Escuela de Marketing Gastronómico y escritora, Erika Silva, que presentará casos de éxito de atención al cliente y estrategias encaminadas a incrementar la rentabilidad y responder fácilmente a las nuevas necesidades de los clientes. La jornada es gratuita y está abierta al público general hasta completar aforo. Las inscripciones pueden realizarse en la web del CCT, www.cctmurcia.es.

 

La finalidad del ciclo puesto en marcha por el CCT es reivindicar la importancia que tiene gestionar de forma óptima el servicio de sala de un restaurante de cara a conseguir que la experiencia gastronómica sea perfecta. La iniciativa se suma a la batería de actuaciones formativas impulsadas por la Consejería de Desarrollo Económico, Turismo y Empleo, que buscan reivindicar todo el potencial de la gastronomía orientado al turismo.

 

El director general del Instituto de Turismo, Manuel Fernández Delgado, recordó “la importancia de la gastronomía como producto transversal a todas las modalidades turísticas” y afirmó que “su desarrollo es esencial para consolidar un destino turístico de excelencia”.

 

Además, resaltó el papel de los maitres y profesionales de sala en el grado de satisfacción y fidelidad de los clientes, ya que ellos “son los que tienen contacto directo con el cliente, el enlace entre la cocina y los comensales, los encargados de crear la atmósfera y, en muchos casos, la única cara visible del establecimiento”.

 

Por último, destacó que el turismo gastronómico “ayuda a favorecer la desestacionalización y el alargamiento de la temporada, crea riqueza y atrae ingresos a la Región”. De hecho, ocho de cada diez turistas afirman que la gastronomía es uno de sus principales alicientes para visitar la Región.

El marketing se cuela en la cocina