viernes. 19.04.2024



Los consumidores españoles pagan mucho más por su tarifa de Internet y telefonía fija que los de otros países de su entorno. Según el análisis realizado por Kelisto.es, la web del ahorro, en España se paga, de media, un 24% más por los servicios de Internet que en el conjunto de países analizados (Alemania, Francia, Reino Unido, Italia y España).


A los consumidores españoles, un contrato medio de Internet (ADSL o fibra óptica) para navegar por Internet en casa y telefonía fija les cuesta 46,95 euros al mes (precio medio de los tres tipos de contrato analizados para este estudio), mientras que la media europea se sitúa en 35,67 euros al mes.


Esto supone que los consumidores españoles pagan 7,28 euros más al mes por su contrato de Internet en casa con telefonía fija incluida. Por países, en Alemania un contrato medio de este tipo cuesta 42,29 euros al mes, 32,85 euros en Reino Unido, 28,84 euros en Italia y 27,43 euros en Francia1. Al finalizar el año, los españoles pagan 87,36 euros más de media que sus vecinos europeos por su contrato de Internet en casa con telefonía fija. Si se compara con el mercado que tiene los precios más bajos, los españoles acaban pagando 234,4 euros más al año que los usuarios de Francia, un 40,5% más.


“A pesar de que en España las tarifas suelen incluir descarga ilimitada de datos en Internet fijo, algo que no es así en todos los mercados europeos, en cuanto a precios el usuario español está en clara desventaja con respecto a sus vecinos, al menos en cuanto a importe de su factura a final de mes se refiere. Teniendo en cuenta el número de líneas de Internet fijo activas en España en el mercado residencial, 10,9 millones, se puede afirmar que los españoles pagan 960,7 millones de euros5 más al año que la media de los consumidores de los países analizados”, señala Manuel Moreno, redactor jefe de Kelisto.es.

 

El mercado de Internet en casa en Europa es muy heterogéneo. En cada país, cada operadora cuenta con distintos tipos de tarifas y planes de precios, lo que dificulta la comparación. En el informe de Ofcom se han analizado los precios medios que se pagarían en cada país teniendo en cuenta tres tarifas tipo, en las que se ha considerado tanto la velocidad ofrecida como una cantidad de datos mínima, ya que hay mercados en los que no son comunes las tarifas planas para navegar desde casa, como ocurre en España.


TARIFA MEDIA. De los tres supuestos establecidos, España presenta las tarifas medias más caras para dos de ellos y en ningún caso proporciona la tarifa más económica a los consumidores. Los usuarios españoles son los que, de media, pagan más en Europa al contratar las tarifas de 10 Mb y 100 Mb de velocidad de navegación (con un mínimo de 25 GB y 100 GB de datos si no se ofrece tarifa plana, respectivamente). Sólo en el caso de las tarifas de 30 Mb de velocidad (con un mínimo de 50 GB de datos), Alemania resulta más cara (43,37 euros de media), sólo un euro por encima de España, que sería el segundo país más caro entre los analizados.


Las diferencias de precio son considerables. En algunas tarifas, los consumidores españoles pueden llegar a pagar hasta un 130,76% más que los de los países que proporcionan las ofertas más baratas. Es el caso de la tarifa con 100 Mb de velocidad (y un mínimo de 100 GB de datos si no se ofrece tarifa plana), que en España cuesta 57,46 euros de media y en países como Francia sólo 24,9 euros.


A pesar de que España cuenta con las tarifas de Internet + telefonía fija en casa más caras entre los países europeos analizados, los consumidores no se animan a cambiar de compañía.


“El consumidor español se caracteriza por su inmovilismo y un cierto miedo al cambio de compañía, a pesar de que según el estudio que hemos realizado en Kelisto.es, podría ahorrar hasta 182 euros6 al año si realizara una compra inteligente y eligiera la tarifa de Internet fijo en casa, ADSL o fibra más telefonía fija incluida, que más se ajusta a sus necesidades de consumo. Todavía existe un cierto miedo al cambio a pesar de que los trámites se han simplificado considerablemente en los últimos años”, señala Manuel Moreno.

Los españoles son los que más dinero pagan de Europa por usar internet