viernes. 19.04.2024

 

 

Las empresas de la Región de Murcia que acojan las prácticas no laborales de jóvenes desempleados de entre 18 y 29 años, e inscritos en Garantía Juvenil, podrán recibir una ayuda de 2.400 euros por persona de la Consejería de Empleo, Universidades y Empresa, a través del Servicio Regional de Empleo y Formación (SEF).

 

Los requisitos para recibir la ayuda son que esas prácticas se prolonguen durante al menos seis meses (este tipo de vinculación sólo puede tener una duración de entre tres y nueve meses) y que la empresa abone mensualmente al joven como mínimo el 110% del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (Iprem) mensual vigente, es decir, 591 euros. Esta cantidad económica funciona como una beca de apoyo.

 

La Comunidad destina un total de 141.000 euros para estas subvenciones, cuyo plazo de presentación es de quince días a contar desde la fecha de alta en la Seguridad Social del trabajador que realice las prácticas. Durante todo el periodo que el joven pase en la empresa, deberá estar acompañado y supervisado por un tutor.

 

El director general del SEF, Alejandro Zamora, destacó que “el propósito principal de esta iniciativa es la formación del joven y que tenga un contacto con el mercado laboral. Hay que tener en cuenta que siete de cada diez jóvenes que realizan estas prácticas no laborales terminan siendo contratados, por lo que está demostrada la eficacia de esta opción”.

 

La subvención se convocó a través del Boletín Oficial de la Región de Murcia (BORM), y el plazo para solicitarla concluye el 1 de octubre del presente año.

 

Los jóvenes participantes deben encontrarse desempleados e inscritos en las oficinas del SEF. Además, es necesario que cuenten con una titulación oficial universitaria, una titulación de formación profesional o bien un certificado de profesionalidad, y no deben haber tenido una relación laboral u otro tipo de experiencia profesional superior a los tres meses en la misma actividad.

 

Las empresas pueden localizar por su cuenta a jóvenes con los perfiles profesionales que precisan, o pueden acudir a las oficinas del SEF, donde se les facilitará una relación de candidatos que cumplen esos requisitos. Uno de los aspectos que se tiene en cuenta es que esas prácticas estén directamente relacionadas con la titulación del joven.

 

ACUERDO PREVIO. Para que un joven parado pueda desarrollar prácticas no laborales en una empresa, ésta debe haber firmado previamente un convenio con el SEF. Durante su vigencia, la empresa puede establecer acuerdos de prácticas con tantos jóvenes como requiera, siempre que se cumplan las condiciones recogidas en el convenio.

 

Alejandro Zamora señaló que “con esta subvención queremos animar a que tanto el tejido empresarial como los autónomos den ese primer paso para la incorporación de un joven desempleado, desde el convencimiento de que esa relación profesional puede convertirse finalmente en una contratación estable”.

Las empresas que acojan prácticas no laborales de jóvenes parados recibirán 2.400 euros