EFECTOS DEL TEMPORAL

Castejón exige a López Miras una Ley Regional de Medidas Fiscales Extraordinarias para los pueblos afectados por la DANA

La alcaldesa de Cartagena le reclama también un Plan Especial para los pueblos ribereños del Mar Menor

La alcaldesa de Cartagena, Ana Belén Castejón ha exigido este martes al presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, una Ley Regional de Medidas Fiscales Extraordinarias para los pueblos afectados por la DANA; la puesta en en marcha de un Plan Especial para los pueblos ribereños del Mar Menor.

 

Además, Castejón ha puesto encima de la mesa otros asuntos como el cumplimiento de la Ley del Rosell; la retirada gradual del amianto en los colegios e institutos de Cartagena; más financiación para el Plan de Barrios y Diputaciones; y una Ley de Financiación Local Regional que garantice que Cartagena obtiene los fondos que necesita y que le corresponden, entre otras cuestiones.

 

Esta Ley Regional de Medidas Fiscales Extraordinarias para los pueblos afectados por la DANA debe incluir  exenciones en impuestos como el de transiciones patrimoniales o el de actos jurídicos documentados, del mismo modo que se aprobó cuando ocurrió el terrible terremoto de Lorca.

 

Dicha ley contemplaría exenciones fiscales como las mencionadas para los vecinos afectados por esta catástrofe natural. “El terremoto que asoló Lorca fue devastador, del mismo modo que lo ha sido esta gota fría, que ha dañado a numerosos pueblos de nuestra Región. Una situación extraordinaria requiere medidas extraordinarias y la Comunidad Autónoma así debe entenderlo. Las exenciones fiscales pueden ser de gran ayuda para vecinos que ahora se ven obligados a hacer grandes inversiones para recuperar todo lo que han perdido”, ha explicado Castejón.

 

Asimismo, la alcaldesa ha solicitado un Plan Especial regional para los pueblos ribereños del Mar Menor, similar al que pondrá en marcha el Ayuntamiento, y que debe estar dotado de partida presupuestaria. “La situación en las localidades costeras como Los Nietos y Los Urrutias ya era muy complicada y las últimas lluvias la han deteriorado aún más.