REFORMA

La CEOE se queda fuera del pacto de Gobierno y sindicatos sobre reforma del subsidio de desempleo

La ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz.
El acuerdo mantiene la sobrecotización para la jubilación de los perceptores mayores de 52 años, que había sido recortada en el primer intento de esta reforma.

El ministerio de Trabajo y los sindicatos han logrado cerrar un acuerdo para reformar el sistema de protección asistencial por desempleo, al que no se ha sumado la patronal, y que incluirá la posibilidad de compatibilizar un empleo con el cobro tanto del subsidio como de la prestación contributiva.

La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, y los secretarios generales de CCOO, Unai Sordo, y de UGT, Pepe Álvarez, firmarán este mismo miércoles el acuerdo que incluye esta reforma, comprometida con Bruselas y necesaria para el siguiente desembolso de los fondos europeos.

Entre otras cosas, el acuerdo mantiene la sobrecotización para la jubilación de los perceptores mayores de 52 años, que había sido recortada en el primer intento de esta reforma haciéndola decaer en el Congreso por el voto en contra de Podemos, junto con PP y VOX.

Desde la patronal, que no se ha sumado al pacto, han aludido en varias ocasiones al escaso diálogo existente en la elaboración de esta reforma.

Tras el rechazo en las Cortes el pasado mes de enero del real decreto de la reforma, que no había sido negociada en esa ocasión con los agentes sociales, el Ministerio de Trabajo inició una negociación con patronal y sindicatos que culminó el pasado lunes, cuando les presentó un documento recogiendo varias de sus propuestas.

Esta reforma pretende mejorar el sistema de protección asistencial, el subsidio de desempleo, que se percibe durante 30 meses en el caso de haber agotado la prestación contributiva, no haber cotizado lo suficiente o tener más de 52 años, entre otros supuestos.

Mejora de la cuantía del subsidio

Actualmente, cerca de 765.884 personas reciben este subsidio, cuya cuantía representa el 80 % del indicador de rentas múltiples (IPREM) -fijado en 2023 en los 600 euros-, es decir, unos 480 euros mensuales.

La nueva propuesta eleva el porcentaje del IPREM, ascendiendo en los primeros seis meses al 95 % del IPREM (unos 570 euros mensuales, 90 euros más), bajando al 90 % en los seis meses siguientes para situarse el resto del periodo, hasta completar un máximo de 30 meses, en el 80 % como en la actualidad.

No obstante, el IPREM no se actualiza y se mantiene en los 600 euros mensuales en 14 pagas, algo que los sindicatos ven completamente insuficiente y piden una subida del mismo o que el subsidio se vincule a otro indicador.

Frente al recorte que planteaba la reforma que fue rechazada en el Congreso, la nueva propuesta mantiene la cotización por jubilación de los perceptores mayores de 52 años en el 125 % de la base mínima vigente en cada momento.

Además, la propuesta permite el acceso al subsidio a los menores de 45 años sin responsabilidades familiares, a los trabajadores eventuales agrarios, a las personas trabajadoras transfronterizas de Ceuta y Melilla, y a quienes acrediten periodos cotizados inferiores a 6 meses y carezcan de responsabilidades familiares.

Como novedad, se extiende el subsidio a las víctimas de violencia de género y a los emigrantes retornados. También se permite compatibilizar los subsidios agrarios de Andalucía y Extremadura con los del régimen general, al tiempo que se reduce el número de jornadas reales requeridas para acceder a los primeros (las llamadas peonadas).

En esta nueva propuesta también se equiparan las cuantías de los subsidios causados por personas con contrato a tiempo parcial con los de tiempo completo, lo que beneficia principalmente a las mujeres.

Compatibilidad del subsidio y la prestación con un empleo

La reforma mantiene que se podrá percibir el subsidio mientras se trabaja por cuenta ajena, ya sea a tiempo completo o parcial, por un periodo máximo de 180 días sin reducción de la cuantía, si bien este complemento será decreciente en el tiempo y disminuirá en función de la jornada de trabajo que se realice.

La novedad incluida en la nueva propuesta amplía esta compatibilidad del trabajo a la prestación contributiva a partir de 2025, una vez transcurrido el primer año del cobro de la prestación, siempre que el salario percibido no supere los 18.900 euros brutos anuales.

Este complemento de apoyo al empleo también será decreciente en el tiempo y oscilará en función de la jornada realizada.