Los contratos firmados durante el primer trimestre tuvieron una duración media de 51 días
La duración media de los contratos en el primer trimestre fue de 51 días, la cifra más baja desde 2006 y un 9,7% inferior a la del mismo periodo de 2022, mientras que la duración media de los contratos iniciales fue de 45 días, un 4% por debajo del dato de 2022.
El "Observatorio trimestral del mercado de trabajo", elaborado por Adecco y presentado este miércoles, señala que, con datos de abril, los contratos con una duración igual o inferior a un mes eran el 33,3%, mientras que aquellos con una duración igual o inferior a una semana representaron el 21,5%, en ambos casos cifras casi idénticas a las registradas un año atrás.
Asimismo, el informe apunta que, tras un año completo de reforma laboral, en el mes de abril el 56,1% de los contratos iniciales que se firmaron fueron temporales, mientras que el 43,9% fueron indefinidos, y de estos el 36,9%, fijos discontinuos.
En este sentido, el director de The Adecco Group Institute, Javier Blasco, destaca en declaraciones remitidas a los medios que el mayor "logro" de la reforma laboral ha sido "mejorar los indicadores de temporalidad".
"Aunque el 35% de los nuevos indefinidos sean fijos discontinuos, e, incluso, si computamos estos como no estables, el porcentaje entre estables y no estables sería del 30% y 70% en la contratación inicial, cuando antes de la reforma laboral era de un 10% y 90%", resume Blasco.
Por jornada, en abril la contratación temporal a tiempo parcial cayó un 18,7% respecto al mismo mes de 2022, y en el caso de los temporales a tiempo completo el retroceso fue del 15,6%, mientras que los indefinidos a tiempo completo se incrementaron un 6,1% y los indefinidos a tiempo parcial lo hicieron un 6,5%.
"El empleo parece resistir a la crisis y la resiliencia de nuestra economía esperemos nos permita cumplir con las expectativas de que el crecimiento del PIB en 2023 estará cerca del 2%", añade Blasco.