Cajamar obtiene un 12,3% menos de beneficios (50,1 M€)
El crecimiento del negocio, tanto de la inversión crediticia como de los recursos gestionados, junto a la disminución del activo irregular, contribuyen a mejorar el balance de Grupo Cajamar en el primer semestre del ejercicio, período en el que los ingresos obtenidos aportan solidez, reducen la tasa de morosidad al 2,97%, refuerzan las coberturas y elevan la solvencia respecto al trimestre anterior. Asimismo, la rentabilidad (ROE), aumenta un 1 p.p. en relación al cierre del año anterior y se sitúa en el 2,8%.
La gestión prudente del Grupo Cajamar, priorizando la mejora de la calidad del balance y destinando una parte sustantiva de los ingresos del negocio a provisiones y saneamiento y deterioro de activos financieros y no financieros, concretamente 238 millones de euros, repercute en el resultado consolidado neto, que asciende a 50,1 millones de euros y supone un 12,3% menos en términos interanuales.
La calidad de los activos mejora con la disminución del activo irregular, consecuencia del descenso en 359 millones de los activos dudosos, un 24,3% menos respecto al mismo periodo del año anterior, lo que facilita una reducción de la tasa de morosidad de 1,2 puntos y que se sitúe en el 2,97%, 1,1 puntos por debajo de la media sectorial.
Por su parte, los activos adjudicados netos disminuyen en 364 millones de euros, un 34,8% inferior que el segundo trimestre de 2021. A su vez, las coberturas de los distintos componentes del activo irregular también se han reforzado tanto interanualmente como respecto al trimestre anterior; en concreto la tasa de cobertura de la morosidad hasta el 74,5%, y la tasa de cobertura de activos adjudicados hasta el 64,8%, una vez incorporadas las quitas producidas en el proceso de adjudicación.
El buen comportamiento del negocio, apoyado en la reactivación de la actividad comercial y en el aumento de la vinculación de la clientela, permite anotar un margen bruto de 593 millones de euros, gracias al impulso de las comisiones, que aumentan un 23,4% interanualmente, fundamentalmente por las correspondientes a operaciones de desintermediación -seguros, fondos de inversión, planes de pensiones y consumo- que se incrementan un 30,9%.
Adicionalmente, la reciente subida de los tipos de interés acordada por el BCE hace prever una perspectiva favorable de los ingresos de la actividad bancaria en los próximos trimestres.
De otra parte, los gastos de explotación continúan perdiendo peso en la cuenta de resultados y, en términos homogéneos de un semestre con otro, crecen un 2%, muy por debajo de la inflación que aumenta en tasa interanual un 10,2%.