El Puerto da los primeros pasos para recuperar ambientalmente los terrenos de Peñarroya
El Puerto de Cartagena da los primeros pasos para la mejora ambiental de Peñarroya, licitando el proyecto de limpieza y demolición de los edificios en ruina. La actuación está contemplada en el Plan de Acción Inmediata para la Recuperación Económica tras COVID-19.
Los terrenos de la antigua fundación de Peñarroya, ubicados cercanos a los muelles de Santa Lucía, se convertirán en una oportunidad de mejora ambiental y económica en todo su entorno, tras los trabajos de limpieza y demolición de los edificios declarados en ruina que se encuentran licitados.
Las actuaciones se realizarán sobre una parcela de 65.200 m 2 que pasó a ser propiedad de la Autoridad Portuaria el pasado mes por importe de 1,4 millones de euros tras la firma del acta de justiprecio de mutuo acuerdo que pone punto final al proceso de expropiación iniciado hace más de una década.
En la primera fase de la actuación, además de la demolición de los edificios que se encuentra en el interior del recinto, se retirarán los neumáticos, bidones rellenos, talado de árboles, limpieza y desbroce del terreno, retirada de escombros previa identificación y análisis de los materiales que estén catalogados como peligrosos y refuerzo del vallado perimetral. Los residuos peligrosos por presencia de metales pesados serán los primeros en retirarse y, tanto estos como los no peligrosos serán entregados a empresas de residuos autorizadas y vertederos específicos.
Para la demolición de los edificios, previamente se retirarán las cubiertas de fibrocemento, durante esta actuación únicamente estará presente en el recinto la empresa encargada de su desmontaje, el proceso comenzará por las plantas superiores, descendiendo planta a planta hasta la baja.
Yolanda Muñoz considera que “las actuaciones que se van a realizar en estos suelos va a suponer un beneficio para los cartageneros, sobre todo para los vecinos del barrio de Santa Lucía ya que son los que están más cercanos. De una vez por todas, se va descontaminan de metales pesados toda la zona correspondiente a la parcela y las consecuencias que puede tener para la salud son indudablemente beneficiosas tanto para los vecinos como para todos los deportistas que pasan a diario. Supone una gran carga económica para el puerto, pero lo beneficios hacia la ciudadanía lo compensa”.
El Plan de Acción Inmediata para la Recuperación Económica tras el COVID-19 contempla una partida específica para esta actuación que se inicia con los trabajos de demolición con un presupuesto de 6 millones de euros, programada en dos fases y que dotará de suelo anexo a las dársenas, pero en ningún caso se contempla una ampliación del espacio utilizado para contenedores.
Esta primera actuación cuenta con un presupuesto de más de un millón de euros para la demolición de los edificios y la limpieza superficial de los materiales acopiados en el terreno, en un plazo de 6 meses una vez esté adjudicada.
En la segunda fase se procederá a la adecuación de la parcela para que pueda tener un uso productivo. Como paso previo a esta segunda fase, se realizarán nuevos estudios del terreno y una caracterización de los suelos contaminados a fin de determinar el tipo de actuaciones a realizar, siempre con la intención de darle utilidad como suelo industrial y logístico básico cercano a los muelles de Santa Lucía, a corto plazo y motivado por la demanda de empresas portuarias de suelo para almacenamiento y depósito de mercancías de tránsito desde la Región de Murcia a otros destinos nacionales e internacionales. Es una actuación de desarrollo sostenible propia del compromiso de un puerto que apuesta por el cumplimiento de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).