Las empresas familiares piden bajar las cotizaciones sociales y vigilar salarios para crear más empleo
El congreso reúne hasta este martes a más de 500 participantes, entre ellos empresarios, propietarios y accionistas de grandes corporaciones, bajo el lema 'La fuerza de las personas'.
Las empresas familiares celebran en Bilbao su congreso anual con la participación del rey Felipe VI. El presidente del Instituto de la Empresa Familiar (IEF), Andrés Sendagorta, ha pedido en su intervención que se reduzcan las cotizaciones sociales y la fiscalidad para poder crear más empleo.
El congreso reúne hasta este martes a más de 500 participantes, entre ellos empresarios, propietarios y accionistas de grandes corporaciones, bajo el lema "La fuerza de las personas". Entre ellos, Amefmur con su presidente al frente José María Tortosa y varios representantes de empresas familiares de la Región de Murcia.
Sendagorta explicó que "el principal desequilibrio de la economía española es el desempleo. Es la principal causa de las desigualdades sociales". Para el también presidente de Sener, "las subvenciones pueden ser un remedio temporal necesario" y defendió que hay que crear más empleo, "más empleo productivo privado, que es el que genera riqueza".
A los representantes de las empresas familiares españolas les preocupa más la estabilidad institucional que la situación de la deuda y el déficit público o la reducción de los trámites burocráticos.
En una encuesta realizada en vivo a los participantes en el Congreso Nacional de la Empresa Familiar, se ha preguntado por cuáles deberían ser las prioridades del Gobierno para 2024 y se daban cinco opciones de respuesta (se podían elegir dos): Formación, finanzas públicas, mejora de la Administración, estabilidad institucional y complejidad regulatoria.
El resultado fue que el 51% situó la estabilidad institucional como la prioridad, muy por encima de la formación (32%) y de la situación de la deuda y el déficit público (31%).
Al opinar sobre cómo ven la economía para 2024, los empresarios se mostraron optimistas con las perspectivas de sus empresas, pero más bien pesimistas con las del país.
Así, el 53% espera mantener plantilla y el 37%, ampliarla, y el 50% prevé aumentar las ventas y el 30% cree que las mantendrá. Sin embargo, el 55 % piensa que la economía española tendrá un crecimiento "frágil" sin crear empleo y un 43 que el crecimiento y la generación de trabajo será "moderada".
Ana Botín
La presidenta del Banco de Santander, Ana Botín, ha afirmado que el sector privado es "el que va a financiar" la transición energética, por lo que ha pedido a los gobiernos que establezcan un "marco regulador que permita esa financiación".
Ana Botín ha mantenido un diálogo con Sabina Fluxá, vicepresidenta y CEO del Grupo Iberostar. La presidenta del Banco de Santander ha explicado que esta entidad "tiene los valores de un empresa familiar, aunque ya no lo sea en sentido estricto".
Ha resaltado que la empresa familiar, en la que "tienes responsabilidad de generar beneficios pero también de invertir", supone unos "valores que se extienden al resto de empresas" si se quieren unos resultados a corto plazo pero también dentro de "cien años".
"Si no hay empresa no hay impuestos, no hay educación ni sanidad públicas. Esto es algo que los ciudadanos tienen que entender pero hoy lamentablemente no se entiende", ha agregado Botín.
Respaldo del Rey
El rey Felipe VI ensalzó la importancia de las empresas familiares para la economía española, especialmente de aquellas que se encuentran en sitios más aislados o alejados de los centros urbanos más poblados porque constituyen «una auténtico pulmón económico en esos territorios» y contribuyen a una «verdadera vertebración del país». Una de las señas de las empresas familiares el «arraigo», explicó, que puede ser una ventaja pero también puede añadir dificultades a la hora de atraer personas a trabajar. Por eso, el rey señaló que hay que ofrecer facilidades como servicios de calidad, educación para sus hijos, infraestructuras y sanidad en esas zonas, y no es sencillo.
El rey Felipe VI ha destacado la necesidad de ofrecer "facilidades" a las empresas familiares más alejadas de los centros urbanos más poblados, al considerar que estas compañías contribuyen a una "verdadera vertebración" de España.
En la apertura del congreso, el rey ha subrayado que más de un millón de empresas en España son familiares, lo que representa casi el 90 % del total y ello refleja la "enorme importancia y relevancia" de estas compañías en la economía española.
Ha destacado que una de las señas de identidad de la empresa familiar es el "arraigo", lo que en algunos casos puede suponer un "ventaja", pero "en otros muchos también puede representar una dificultad adicional a la hora de incentivar a las personas a desplazarse a trabajar en ellas".
Felipe VI ha aludido así a las empresas familiares que se encuentran en sitios más aislados o alejados de centros urbanos más poblados, para las que ha pedido "facilidades" e "incentivos" como servicios de calidad, educación para los hijos de los trabajadores, sanidad e infraestructuras, lo cual, ha añadido, "no es sencillo y no depende solo de las empresas".
Esas empresas, a las que ha querido rendir un "especial homenaje", constituyen, según el monarca, "un auténtico pulmón económico en esos territorios" y contribuyen a una "verdadera vertebración del país".
"Ante la incertidumbre y los desafíos, las empresas siempre deben formar parte de la solución, en cualquier circunstancia y situación", ha señalado el rey.