Endesa prevé ganar 5.400 millones en los próximos tres años
Endesa prevé obtener un beneficio neto ordinario de 5.400 millones de euros en el periodo 2021-2023, año este último en el que, como en 2022, dedicará un 70% del beneficio al dividendo, y ha avanzado que en la década 2021-2030 invertirá 25.000 millones de euros.
La compañía, participada en un 70% por el grupo italiano Enel, ha publicado este miércoles en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la revisión de su plan estratégico para el trienio 2021-2023, en el que prevé que el beneficio neto ordinario pasará de los 1.700 millones de euros estimados para 2021 a 1.900 millones en 2023, lo que supone un incremento de casi el 12%.
Endesa, que prevé incrementar en un 50% su capacidad renovable para en 2023 alcanzar los 11,5 gigavatios (GW) frente a los 7,7 GW con que estima cerrar 2020, prevé repartir en el periodo 2021-2023 4.700 millones en dividendos, la misma cantidad que en el periodo 2020-2022, pese a la rebaja del 'pay out' o porcentaje del beneficio destinado a dividendo que se empezará a aplicar a partir de 2021, que suplirán unos mayores beneficios.
La compañía ha anunciado este miércoles que distribuirá un dividendo a cuenta con cargo a los resultados de 2020 de 0,70 euros brutos por acción, que se abonará el próximo 4 de enero.
En el periodo 2021-2023, la inversión bruta acumulada será de 7.900 millones de euros, un 25 % más, aunque Endesa en esta ocasión, al igual que ayer su matriz Enel, hace una proyección hasta 2030, en la que estima una inversión de 25.000 millones para elevar al 80 % el porcentaje de toda su generación libre de emisiones de CO2 en esa fecha.
De los 7.900 millones de inversión prevista para estos tres años, 3.300 millones serán para incrementar el parque de generación de energía renovable, un 20 % más que en el plan anterior.
Con esta inversión, Endesa espera alcanzar los 11.500 MW solares, eólicos e hidráulicos al final de 2023 -en torno a un 50 % más respecto a los 7.700 MW con que la compañía espera concluir 2020- y que un 62 % de su parque de generación en la Península sea de origen renovable a finales de 2023 frente al 45 % actual.
25.000 MILLONES DE INVERSIÓN HASTA 2030. En cuanto a los 25.000 millones hasta 2030, 10.000 millones (el 40%) se destinarán a nueva potencia renovable para alcanzar un mínimo de 18.000 megavatios -10.000 MW más que a cierre de 2020-, y otros 10.000 millones (otro 40 %) a digitalización y modernización de la red para mejorar el servicio y permitir, entre otras cuestiones, mecanismos de flexibilidad de demanda en hogares y empresas de hasta 1.000 MW. Endesa prevé que entre 2021 y 2025 entren en operación 7.300 MW de renovables, de los que el 68% corresponden a plantas fotovoltaicas y el 32% a eólicas. La inversión en redes se incrementa un 30% respecto al plan anterior, hasta los 2.600 millones de euros.
En cuanto a Endesa X, la división de movilidad y soluciones para clientes de la compañía, el plan prevé que tenga instalados 56.000 puntos de recarga, sumando los públicos y privados, a cierre de 2023 desde los 8.000 con que cerrará 2020.
Además, Endesa X prevé poner en operación instalaciones de producción (modelo autoconsumo), con una potencia gestionada de 161 MW a cierre de 2023.
Según la actualización del plan de Endesa para 2021-2023, el beneficio neto ordinario experimentará un crecimiento del 12%, hasta alcanzar los 1.900 millones de euros en 2023.
Las estimaciones son que la compañía cierre este 2020 con un beneficio neto ordinario de en torno a 2.000 millones de euros, que descendería a 1.700 millones en 2021 para luego subir a 1.800 millones en 2022 y a 1.900 millones en 2023.
Por su parte, el resultado bruto operativo (ebitda) está previsto que pase de 3.900 millones estimados para 2020 hasta 4.300 millones de euros en 2023, un 10%, impulsado por el aumento de la inversión.
El ebitda previsto para el cierre de 2020 es de en torno a 3.900 millones, de 4.000 millones para 2021, de 4.100 millones en 2022 y de 4.300 millones para 2023.
La deuda neta también crecerá, como consecuencia de las mayores inversiones, y pasará de los 7.100 millones con que se espera que cierre 2020 a 10.000 millones al finalizar 2023, un 40% más, si bien el coste de la misma se verá rebajado de un 1,8% de promedio en 2020 al 1,4% al final del plan estratégico.
Además, el porcentaje de la deuda bruta ligada a objetivos de sostenibilidad pasará del 45% del total para 2020 a alrededor del 60% en 2023.