RESULTADOS

Iberdrola incrementó su beneficio neto un 17,2% hasta septiembre

Ignacio Galán, presidente de Iberdrola.
En cuanto a los tributos, esta partida se sitúa en 2.076 millones de euros en los nueve primeros meses de 2023, incluido el impacto del gravamen del 1,2% sobre ventas en España, de 213 millones de euros, con aplicación por dos ejercicios. 

Iberdrola incrementó su beneficio neto un 17,2% hasta septiembre con respecto al mismo periodo del año pasado, hasta los 3.637 millones de euros, gracias a una mayor producción y a las menores compras de energía.

Según ha informado este jueves la eléctrica a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el resultado bruto de operación creció un 13,2%, hasta los 10.783 millones de euros, en los nueve primeros meses del año, incluyendo el impacto anual del nuevo gravamen del 1,2% sobre ventas en España, de 213 millones, y otros efectos de menor cuantía, como el mayor canon hidroeléctrico y el mayor gasto en el bono social.

La compañía, que ha anunciado que tras alcanzar este año el suelo de dividendo para 2025 va a aumentarlo a cuenta en 2023 un 11%, hasta los 20 céntimos de euro por acción, ha mejorado sus previsiones de beneficio neto para el año hasta el doble dígito, excluyendo cualquier plusvalía adicional por rotaciones de activos.

Iberdrola ha informado de que sus inversiones brutas alcanzaron los 10.842 millones de euros en los últimos 12 meses, con un crecimiento de la base de activos regulados (RAB) en el negocio de redes del 9%, hasta los 41.200 millones, instalando 3.100 megavatios (MW) renovables en los últimos doce meses, hasta un total de 41.300 MW.

La cifra de negocios descendió un 1,9%, hasta los 37.193 millones de euros, mientras que el gasto operativo neto se situó en 4.340,6 millones, un 14,5% más, por el efecto del exceso de provisión por pensiones registrado en 2022 en Estados Unidos y el impacto de la cancelación de los proyectos de Park City Wind y Commonwealth Wind.

Sin esos impactos, el gasto operativo neto crecería sólo un 6,5%, según la eléctrica.

En cuanto a los tributos, esta partida se sitúa en 2.076 millones de euros en los nueve primeros meses de 2023, incluido el impacto del gravamen del 1,2% sobre ventas en España, de 213 millones de euros, con aplicación por dos ejercicios, y que PSOE y Sumar han anunciado esta semana, en su acuerdo para reeditar la coalición de Gobierno en España, que quieren renovarlo, junto al impuesto extraordinario a la banca.

Iberdrola también ha tenido que pagar más por el canon hidroeléctrico por el aumento de la producción con dicha tecnología y ha tenido un mayor gasto en bono social, al ampliarse en marzo de 2022 los descuentos en la factura para los clientes vulnerables beneficiarios.

La partida de amortizaciones de Iberdrola aumentó un 1,9%, hasta los 3.494,6 millones de euros, hasta septiembre con respecto a los nuevos primeros meses de 2022, por la mayor base de activos del grupo; mientras que las provisiones lo hicieron en 40,8 millones, hasta alcanzar los 475,6 millones, por las mayores provisiones por insolvencias ante el mayor importe de la facturación.

Por su parte, las ventas de electricidad durante los nueve primeros meses de 2023 disminuyeron un 3,3% por las menores ventas a 'spot' (mercado eléctrico mayorista) y en los mercados a plazo.

La deuda financiera neta ajustada de Iberdrola se situó al finalizar septiembre en 47.951 millones de euros, un 8,3% más respecto a septiembre de 2022, debido al esfuerzo inversor y a la evolución de los tipos de cambio.

La posición de liquidez del grupo Iberdrola, que ha anunciado que celebrará su Capital Markets Day el próximo mes de marzo, es de 20.204 millones de euros, lo que le permite cubrir necesidades financieras por 21 meses sin recurrir al mercado en el caso base y 16 meses en el de riesgo.