28 inversores murcianos colaboran con el proyecto De-Risk de flexibilidad energética
El proyecto De-Risk impulsa la colaboración de los usuarios finales en los mercados locales de flexibilidad. Recientemente, en el piloto murciano, se ha lanzado una campaña de financiación participativa (Crowdlending). Esta revolucionaria iniciativa, que cuenta con la participación de 28 inversores de la Región de Murcia, servirá de investigación para otros modos de financiación. Respaldado por la Unión Europea con dos millones de euros, De-Risk cuenta con diez socios europeos, entre los que se encuentra la compañía murciana MIWenergía.
La ciudadanía murciana participa en la transición energética
28 inversores ya han participado en el proyecto De-Risk mediante la campaña de crowdlending, consiguiendo el 100% de la recaudación. Esta iniciativa les brinda la posibilidad de convertirse en inversores de un proyecto innovador europeo que apuesta por la instalación de sistemas de autoconsumo fotovoltaico y la monitorización inteligente de los consumos energéticos en hogares. Mediante distintos dispositivos y tecnología desarrollada, se optimizan los patrones de consumo energético, reduciendo la congestión de la red eléctrica y consiguiendo la energía a un precio más barato.
Esta alternativa de financiación empodera a los inversores, pudiendo hacerles partícipes de las soluciones innovadoras que se están desarrollando en Europa gracias a proyectos de investigación relacionados con la eficiencia energética y la revolución del prosumidor, como el De-Risk.
La campaña, que ya ha completado el 100% de la inversión, ha sido diseñada como un proyecto 'kilómetro cero', es decir, prioriza la participación de personas físicas y jurídicas de la zona de Murcia. En el marco del proyecto De-Risk, esta forma de inversión se gestiona a través de la plataforma E-Crowd, con la colaboración de MIWenergía, encargada de la gestión de los préstamos y uno de los dos socios españoles del proyecto De-Risk.
La solución De-Risk: escalable para toda la sociedad
Enmarcado en el programa Horizonte Europa y con un presupuesto de dos millones de euros, De-Risk fomenta la participación de los usuarios finales en los mercados locales de flexibilidad. Para su correcta consecución, se desplegará una plataforma en cuatro casos de estudio, uno en Irlanda y Turquía y dos en España (Murcia y Barcelona).
Este proyecto, que fomenta el autoconsumo fotovoltaico, no se limitará a los cuatro demostradores europeos, sino que podrá ser escalado y replicado masivamente, beneficiando a toda la sociedad.