Los economistas advierten de que una de cada diez empresas en ERTE no podrá volver a abrir

Una de cada diez empresas que se han acogido en el último mes y medio a un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) están abocadas a un procedimiento concursal cuando se recupere la actividad por la caída de la demanda, y los problemas que tendrán para hacer frente a los costes laborales, fiscales y de producción.

"El gran problema de esta crisis es que muchas de las empresas que han tenido que cerrar no podrán volver a abrir", sostiene en una entrevista con Efe el decano del Colegio de Economistas de Murcia, Ramón Madrid, quien reclama medidas excepcionales de ayuda al tejido empresarial por ser el gran perjudicado en la pandemia.

Este experto, miembro del comité constituido por el Gobierno regional para diseñar la estrategia de reactivación económica y social pos-Covid 19, subraya que la recuperación está directamente ligada al control de la pandemia y que, en esta crisis, intervienen variables exógenas a la economía que tienen que ver con el tiempo que transcurrirá hasta que salga al mercado una vacuna o se homologue un tratamiento, por ejemplo.

No todos los sectores se están viendo de la misma forma afectados ni saldrán, en consecuencia, al mismo ritmo de esta crisis, afirma Ramón Madrid, quien pone el acento en el turismo, la hostelería y el pequeño comercio como grandes víctimas del coronavirus.

"Es triste decirlo, pero muchas de las empresas que se han visto obligadas a cerrar durante meses no tendrán capacidad para reabrir. Y es una tragedia que ocurra esto porque no es fácil abrir una empresa, crear trabajo y generar demanda y consumo", explica.

Por eso, valora los avales públicos puestos a disposición de la banca, a través del ICO, para que pymes y autónomos financien sus operaciones, pero pide otras medidas en las que ya trabaja la Seguridad Social, junto al Consejo General del Poder Judicial y abogados y economistas, según explica, para evitar el cierre definitivo de empresas.

"Se estima que el 10% del medio millón de ERTEs presentados termine en un procedimiento concursal y los concursos de acreedores, tal y como se desarrollan hoy, serán el cierre de esas empresas", advierte Ramón Madrid, quien defiende medidas adicionales a través de la Ley de Segunda Oportunidad o de refinanciación de deuda en fase preconcursal.

El decano de los economistas murcianos cree que es pronto para vaticinar la afectación de la pandemia de la Covid 19 en la economía española porque dependerá de la duración de ésta, aunque los analistas coinciden en que el PIB se resentirá un 4 por ciento por cada mes que transcurra.

Murcia, afirma, juega con la "ventaja" a corto plazo del peso del sector primario en su economía, por lo que estima que el daño de la crisis económica y sanitaria del coronavirus será alrededor de un quince por ciento inferior que en el resto de España en el horizonte temporal más inmediato.

Sobre las diferencias entre esta crisis económica y la de 2007, el decano de los economistas explica que ésta es de carácter global, afecta a todas las economías del mundo y ha llegado de forma "abrupta e inesperada", lo que ha dejado en entredicho los planes de contingencia de las empresas y los gobiernos "porque no se contaba con algo así".

También ha puesto el acento en que esta crisis económica es de oferta y demanda. "Hay escasez de producción en determinados sectores y poca demanda también porque la incertidumbre genera austeridad y ahorro", subraya, a lo que se añade la debilidad del mercado de trabajo y la falta de solvencia de las economías domésticas.

En su análisis, Ramón Madrid subraya que otro de los hándicap de esta crisis es que la demanda internacional también ha caído a causa de la Covid 19, por lo que las exportaciones no aliviarán la economía, como ocurrió la década pasada.

"La demanda internacional, por la importancia del sector agrícola y las exportaciones, ha ayudado a Murcia muchas veces y esperemos que esta vez vuelva a ser palanca, pero no creo que a corto plazo", opina Ramón Madrid, quien urge a las administraciones a que ayuden a las empresas a superar la recesión porque "tenemos que readmitir a los miles de trabajadores que tienen suspendidos sus empleos".

No obstante, reconoce que, a diferencia de en la anterior crisis, las administraciones públicas están hoy muy endeudadas, por lo que deberán hacer un ejercicio de imaginación, subraya, para compensar su falta de liquidez y "hacer todo lo posible para que las empresas no cierren".