Los requisitos de Martínez Vidal para quien sea su nuevo jefe de gabinete

La consejera de Empresa de Murcia, Ana Martínez Vidal, ha emprendido la búsqueda de un nuevo jefe de gabiente, un puesto de la máxima confianza para cualquier consejero, después de verse obligada a destituir al primer inquilino de ese despacho, José Manuel Ruiz López.

Ruiz, quien tenía experiencia en el cargo al haberlo desempeñado para el anterior director del Info, Joaquín Gómez, fue fulminado por Martínez Vidal de su cargo apenas tres semanas después de su nombramiento al conocerse que pesaba sobre él una condena a 15 meses de presión por un delito de insolvencia punible, algo que no comunicó a la consejera.

Ahora, tras casi dos meses con el cargo vacante, la consejera ha decidido activar la búsqueda del candidato perfecto, y ha decidido hacerlo en Linkedin.

La titular de empresa tiene muy claras las características que debe reunir quien quiera trabajar con ella en este puesto: "Debe tratarse de una persona formada, con perfil político y vocación de servicio público. Serán prioritarios aquellos perfiles que hayan desarrollado funciones en un gabinete con anterioridad. El puesto requiere dedicación exclusiva, máxima disponibilidad, lealtad, honradez, discreción y compromiso. Capacidad de coordinar, organizar y dirigir equipos", escribe la propia consejera en su perfil en la red social profesional.

Martínez Vidal, incluso, facilita su e-mail personal para que quienes se van capaces le manden sus currículums.

¿QUÉ HACE UN JEFE DE GABINETE? Un jefe de gabinete suele ser, por lo general, un cargo de máxima confianza del responsable político, y, en muchas ocasiones, suelen haber trabajado juntos con anterioridad y existe gran compenetración.

Se trata del más estrecho colaborador del alto cargo, y suele tener una gran capacidad de decisión sobre la agenda del político, las personas con las que se reúne o recibe, las entrevistas que concede a la Prensa, y tiene gran capacidad de influencia sobre asuntos de índole política.

Muchos de ellos han tenido gran 'mando en plaza' despachando asuntos por ellos mismos y 'despejando' la habitualmente muy enrevesada agenda del político. Por tanto, un jefe de gabiente es un puesto clave en cualquier estamento político.

Aunque su peso y funciones varían ligeramente en función de los departamentos y las diferentes legislaciones, en algunos países, como Estados Unidos, el jefe de gabinete de la Casa Blanca es, de facto, el 'número dos' del Ejecutivo norteamericano, lo que da buena muestra de la importancia del cargo.