TRASVASE

El Consejo de Ministros consuma el tijeretazo al trasvase Tajo-Segura

El Gobierno central ha acordado reducir de 38 a 27 hectómetros cúbicos al mes la cantidad de agua trasvasada

La cantidad mensual trasvasable se establecerá en función de las existencias conjuntas de los embalses de Entrepeñas y Buendía a comienzos de cada mes.

El Gobierno central ha acordado reducir de 38 a 27 hectómetros cúbicos al mes la cantidad de agua trasvasada en el acueducto Tajo-Segura en situación de normalidad hídrica (nivel 2), para "garantizar la estabilidad del sistema".

 

El Consejo de Ministros ha aprobado este martes un Real Decreto por el que se modifican las reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura (ATS) y establece nuevos umbrales para la cesión de caudales con el fin de evitar situaciones de excepcionalidad y trasvase cero a las cuencas receptoras.

 

Esta decisión atiende, según una nota del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Democráfico (Miteco), cuenta con el aval de la Comisión Central de Explotación del Trasvase y del Consejo Nacional de Agua, que también han aprobado una actualización de las tarifas de aprovechamiento del trasvase. Lo que ha despertado duras críticas desde las comunidades beneficiarias del trasvase, especialmente del Gobierno de Murcia.

 

Según lo acordado, la cantidad mensual trasvasable se establecerá en función de las existencias conjuntas de los embalses de Entrepeñas y Buendía a comienzos de cada mes, con un máximo anual total de 650 hm3 en cada año hidrológico (600 hm3 para el Segura y 50 hm3 para el Guadiana) y de acuerdo con los niveles establecidos.

 

Desde el Miteco han explicado que "la principal modificación" afecta al nivel 2 (normalidad hídrica), que hasta ahora fijaba en 38 hm3/mes el posible aporte de agua desde la cabecera del Tajo en condiciones establecidas, y a partir de ahora, el desembalse será de 27 hm3/m, lo que "favorecerá una mayor estabilidad para todas las cuencas, tanto cedentes como receptoras".

 

En el caso de las cedentes se verán beneficiadas porque "los embalses de Entrepeñas y Buendía dispondrán durante más tiempo de mayor volumen de agua almacenada", mientras que las receptoras, "al racionar el agua que reciben al mes mantendrán un flujo constante más tiempo y sin interrupciones", según fuentes ministeriales, que inciden en que permitirá una mejor planificación para el riego.

 

Para el Miteco, este acuerdo busca "adaptar una infraestructura crítica para el abastecimiento de tres millones de personas en Castilla-La Mancha, Murcia y Albacete a la realidad ineludible del cambio climático, de la alteración de los patrones de lluvias y, en suma, de una menor disponibilidad de agua".

 

Con vistas a contrarrestar este escenario, Transición Ecológica trabaja en alternativas, duplicando la capacidad de generar agua desalada para usos agrícolas, la interconexión del sistema de desaladoras en una red conjunta de todo el Levante con mayor capacidad operativa, y en un plan de apoyo a las energías renovables para rebajar el precio del agua desalada.