JORNADAS

El Imida trabaja para evitar que desaparezcan razas autóctonas

La consejera Sara Rubira en las Jornadas gastronómicas ‘De los genes a la mesa’.

Razas como el chato murciano incrementan su población en casi tres décadas gracias a sus investigaciones, según se expuso en las jornadas gastronómicas ‘De los genes a la mesa’, que cumplen su décima edición.

Las jornadas gastronómicas ‘De los genes a la mesa’, que cumplen su décima edición, han puesto en valor la gran calidad y aspectos diferenciadores que aportan a la gastronomía la carne procedente de las razas autóctonas de cerdo chato murciano y de la oveja segureña. Esto es posible gracias a los proyectos de investigación impulsados por la Comunidad, a través del Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Medioambiental (Imida), para preservar y recuperar las razas propias de la Región de Murcia, algunas de ellas en peligro de extinción.

La consejera de Ganadería, Sara Rubira, destacó durante la inauguración de la jornada que “el Gobierno regional trabaja junto con ganaderos y productores de carne para recuperar, mantener e impulsar la cabaña de estas razas autóctonas con la finalidad de divulgar sus cualidades y potenciar su comercialización”. En la misma se debatió sobre la situación actual y las perspectivas de futuro del chato murciano y la oveja segureña.

Rubira aseguró que “el objetivo es que los ganaderos apuesten por estas razas y logremos que sean apreciadas y demandadas, tanto por el público en general como por los profesionales, para que su cría y su comercialización sea rentable y viable económicamente”.

El Imida, desarrolla desde hace cerca de tres décadas diversos proyectos de investigación cuya finalidad es conservar las razas autóctonas, con especial atención a las que se encuentran en peligro de extinción. Para ello, realiza estudios productivos, genéticos y reproductivos, de calidad de la canal, de la carne y de los transformados cárnicos y productos tradicionales de la Región. 

Entre ellos destacan el chato murciano, la vaca murciano-levantina, la gallina murciana, las ovejas segureña y montesina, la cabra murciano-granadina o el palomo deportivo murciano, entre otras.

Muchas de las líneas de investigación persiguen la conservación y recuperación de los recursos genéticos adaptados a las condiciones climáticas actuales del Levante y a la búsqueda de animales resilientes al estrés calórico y al cambio climático. 

La titular de Ganadería explicó que “algunos de estos proyectos de investigación buscan la obtención de derivados gastronómicos innovadores, procedentes de nuestras razas autóctonas, y su transferencia al sector, para potenciar la oferta gastronómica de la Región, y que contribuyan a elevar la gastronomía a la categoría de ciencia, de gran impacto económico y social”.

Incremento en el censo de las razas

Las investigaciones desarrolladas por el Imida, junto con el sector, han permitido evitar la desaparición de estas razas e incrementar la población, tal y como explicó la consejera durante su intervención. Todo ello gracias al Banco de Germoplasma del Imida, que cuenta con gametos masculinos crioconservados de estos animales para garantizar su conservación y recuperación.

Así, con el chato murciano se ha pasado de la situación de partida, en el año 1997, de tener seis hembras reproductoras y dos verracos, a contar en la actualidad con más de 270 ejemplares (256 hembras reproductoras y 15 machos), pertenecientes a siete ganaderías activas. Además, en la actualidad, la carne y derivados cárnicos de estos animales es demanda y consumida por la población murciana

Con la oveja segureña el Imida está desarrollando actualmente el proyecto ‘Aprovechamiento y valorización de carne de oveja segureña adulta, para la creación de nuevos cortes y productos, en la comarca del Noroeste de la Región de Murcia (OVIFOODTECH)’. Así se reduce el desperdicio de alimentos, mediante la sostenibilidad y economía circular, incrementando el beneficio económico de los ganaderos.