Los productores de pistacho en la Región aplican sensores para calcular la huella hídrica
Con estos datos, el agricultor conoce de forma sencilla las gráficas temporales y umbrales indicadores hídricos para poder modificar el riego y nivel de fertilizantes.
Los propietarios de una finca de pistacheros en Caravaca de la Cruz han instalado sensores para calcular la huella hídrica en este cultivo, del que hay 1.000 hectáreas en la Región de Murcia, aunque todavía no hay ninguna en producción debido a que son plantaciones jóvenes y requieren de entre 6 y 8 años para dar plena producción.
Se trata de una experiencia piloto que permite saber cada 15 minutos, y gracias a una estación medidora, los parámetros de humedad del terreno, temperatura de suelo y ambiente, así como el nivel de baterías y ubicación.
Con estos datos, el agricultor conoce de forma sencilla las gráficas temporales y umbrales indicadores hídricos para poder modificar el riego y nivel de fertilizantes, ha explicado el consejero de Agua y Agricultura, Antonio Luengo, durante su visita a la finca.
El dispositivo permite optimizar la huella ambiental de todos los procesos agrícolas, garantizar la calidad de las explotaciones, emplear y compartir datos, detectar anomalías en el uso del agua o de productos en los cultivos, optimizar los procesos logísticos y dotar al sector de nuevas herramientas.
Actualmente, en la Región de Murcia hay cerca de 1.000 hectáreas dedicadas al cultivo de pistacho, de las que el 40 por ciento corresponden a secano. El rendimiento de este fruto es de 2.000 kilos por hectárea para regadío, que se reduce a la mitad cuando se trata de cultivos de secano.