Rivera propone unificar las ordenanzas municipales en materia de edificación
La Comunidad Autónoma presentó hoy instrucciones que aclaran la puesta en práctica de la Ley del Suelo de la Región de Murcia que aligeran la carga administrativa de los procedimientos y aceleran los trámites para posibilitar la apertura de nuevos negocios en un menor plazo de tiempo.
Estas fueron las primeras conclusiones de la Mesa del Libro Blanco de la Construcción que dio a conocer el consejero de Presidencia y Fomento, Pedro Rivera, a una treintena de representantes empresariales y miembros de asociaciones, y que se enmarcan en el proyecto de simplificación administrativa con el que el Ejecutivo regional pretende favorecer la actividad empresarial y la creación de empleo.
“Con la publicación de estas aclaraciones, la Comunidad da respuesta a las demandas de profesionales, particulares y entidades locales”, afirmó el consejero, quien destacó el trabajo realizado durante diez meses, “que ha hecho posible que hoy podamos presentar una serie de medidas que mejoran la gestión pública relacionada con el sector de la construcción, de la promoción de vivienda y la planificación urbanística”.
La ‘autorización excepcional de interés público’ permite que una empresa se implante de manera inmediata, y se ha emitido una instrucción para evitar trámites innecesarios y duplicidades a la hora de solicitarla. El consejero informó de que en el último año y medio se han autorizado 71 expedientes con tramitación de interés público, que han supuesto una inversión de más de 44 millones de euros y la creación de 886 puestos de trabajo.
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Otra figura que se esclarece es la de la ‘situación fuera de norma’, que evita que ciertas instalaciones se queden fuera de la legalidad e interrumpan su actividad. “La instrucción aclara que por tener esta denominación no se puede paralizar un expediente, ni impedir la autorización de una licencia, entre otras cuestiones”, dijo Rivera.
La tercera instrucción explica pormenorizadamente, con supuestos claros, los denominados ‘títulos habilitantes de naturaleza urbanística’ (licencias, declaración responsable y comunicación previa). Pedro Rivera explicó que estos instrumentos “son más ágiles y aceleran la realización de la obra y, por tanto, el inicio de la actividad económica que se desprende de la misma”.
En la línea de simplificación administrativa, el consejero presentó una propuesta para unificar las ordenanzas municipales en materia de edificación, para posibilitar que las administraciones municipales “hablen el mismo idioma, lo cual evitará la actual disparidad de criterios con la que los profesionales se encuentran”.
“Se trata de una iniciativa pionera en España y para su desarrollo contaremos con la experiencia de los colegios profesionales”, avanzó Pedro Rivera, quien destacó que repercutirá positivamente en un ahorro de costes para la instalación de nuevas actividades.
PROFESIONALIDAD Y EXPERIENCIA DE LAS EMPRESAS LICITADORAS. En el ámbito de la contratación, los componentes del Libro Blanco de la Construcción coincidieron en la necesidad de que se premie la profesionalidad y experiencia acreditada a la hora de adjudicar las licitaciones.
El consejero recordó que el criterio de la selección por concurso ya lo aplica la Consejería en los contratos de los últimos meses, que han ascendido a 65 millones de euros, y se comprometió a “exportar esta recomendación o buena práctica” al resto de la Administración regional y a los ayuntamientos.
Rivera también anunció que se va a potenciar la calidad del empleo con el reconocimiento de la competencia profesional de los trabajadores de la construcción, gracias a la homologación de su capacitación, y se hará en coordinación con el Instituto de Cualificaciones de la Región de Murcia (ICUAM).