COMPRAVENTA DE EMPRESAS; ¿ES SOLO PARA LAS GRANDES?

Uno de los mitos existentes dentro del mundo del M&A, es el de que la compraventa de empresas o de negocios, es algo destinado únicamente a grandes compañías o a grupos multinacionales. Refiriéndonos a un negocio tamaño pyme, a veces en la mente de sus dirigentes no contemplan una venta como una posible salida, o una estrategia de crecimiento inorgánico como posibilidades reales.

“¿Dónde voy yo, a comprar un negocio?” o “¿Quién va a querer comprar mi empresa, si soy un grano de arena en el desierto?”. Pues señoras y señores, nada más lejos de la realidad. Fuera complejos y bienvenidos al mundo real.

M&A PARA PYMES; TAMBIÉN EXISTE

Lo que sucede en realidad, es que hay una profunda falta de información. En muchas ocasiones, por la percepción subjetiva de que es algo muy complejo y reservado a las grandes. Como si nos hablan de ecuaciones diferenciales; si escuchamos algo de operaciones de M&A, automáticamente desconectaremos (un alto porcentaje de la población, por lo menos).

Pero hay que tener en cuenta que, los motivos para querer comprar o vender un negocio, no van a diferir sensiblemente, en términos generales, los de una pyme a los de Microsoft o Amazon. Los motivos serán principalmente:

- Los dueños de una pequeña empresa pueden querer venderla para jubilarse, y lo mismo pueden decir un día Elon Musk o Jeff Bezos, por ejemplo.

- De mercado o estratégicas. Una pyme puede querer comprar otra en otra región para expandir su marca, exactamente igual que Coca Cola puede querer comprar una distribuidora para su producto en Francia, por ejemplo.

- Económicas. Una gran empresa, si necesita fondos, tiene la posibilidad de buscar inyecciones de capital de inversores. Lo mismo puede intentar un pequeño negocio; buscar un proceso de M&A para conseguir financiación (o incluso acudir a mercados de capitales)

Por tanto, no hay razón para no plantear una operación de estas características, aún siendo una empresa tamaño pyme.

M&A PARA PYMES; BREVE GUÍA DEL PROCESO

Sin perjuicio de que cada operación tendrá sus características particulares, y de que desde luego, es fundamental estar bien asesorado tanto para tener el negocio preparado antes de realizar el proceso como para la totalidad del proceso, se puede decir que el desarrollo de un M&A para pymes suele seguir las siguientes pautas o pasos, una vez se ha decidido acometer la operación, y asumiendo que el negocio está preparado y que hay un informe de valoración en el caso de ser vendedores:

- Búsqueda de comprador/vendedor, según el caso. Dependiendo de que tipo de comprador o vendedor estemos buscando, conviene apoyarse en profesionales que conozcan el sector o en general el mundo de la compraventa de negocios.

- ¡Eureka! ¡ya lo tenemos!. Si creemos que hemos encontrado a la contraparte adecuada, será hora de firmar un NDA (acuerdo de confidencialidad) entre ambas partes. Con eso firmado, empieza el intercambio de información y de impresiones.

- Si el intercambio de información es satisfactorio, habrá que presentar/recibir una LOI (carta de intenciones) y/o una oferta no vinculante y negociar la operación en sus términos estructurales, principalmente si se van a comprar acciones o activos, y en qué porcentaje. Esto da ciertas garantías de que hay predisposición a que la operación se cierre, por ambas partes.
- Due Diligence. En esta fase, se lleva a cabo una especie de auditoría del negocio objeto de la transacción. Esto sirve para asegurarse, principalmente a nivel fiscal, financiero, legal y laboral (sin perjuicio de poder hacerse en otras áreas) de que ese negocio no conlleva riesgos sustanciales para sus nuevos dueños.

- Acuerdo final. Con la Due Diligence finalizada y una vez tenido en cuenta su informe, se debe negociar el acuerdo final, fijando precio definitivo, forma de pago, garantías…

Aquí los abogados deberán redactar los contratos correspondientes y asegurarse de que los intereses de sus clientes están bien defendidos.

Como hemos comentado, cada operación es diferente y tiene sus especificidades. Y conviene estar preparado y bien asesorado. Pero que el tamaño de tu negocio no te frene.