Reflexión sobre los plásticos
¿El plástico es nuestro enemigo? Pienso que no tenemos claro cuál es el enemigo real, aunque sé que uno de los más perjudicados es el envase alimentario.
Si bien es cierto que hay que replantear dejar el envase alimentario para evitar su impacto no deseado en el entorno; no podemos pasar por alto sus virtudes, como en lo que respecta en el ámbito de la seguridad alimentaria, ya que mantienen al alimento estable y aislado de fuentes de degradación como pueden ser la luz, el oxígeno y la humedad.
En mi opinión la solución de los plásticos alimentarios consiste en una eliminación organizada:
1. Convertirlos en reciclables, usando un solo material en su fabricación.
2. Concienciar a la gente de la importancia del reciclaje.
3. Mejorar la cadena de reciclaje para alcanzar una economía circular.
4. Eliminar todos los plásticos de un solo uso que no tienen ningún valor añadido en un proceso productivo.
5. Paralelamente a todo ello, trabajar en encontrar nuevas materias primas con las que fabricar envases, y luchar por hacerlos escalables, para poder emplearlos en la industria o buscar nuevas metodologías de trabajo como envases retornables.
Entonces ¿Qué plásticos me preocupan de verdad?
Los micro/nanoplásticos, aquellos que entran silenciosamente en nuestros cuerpos. No los vemos y no podemos elegir sustituirlos en nuestra alimentación. En tu cesta de la compra puedes elegir comprar sin envase, pero no puedes elegir comprar sin microplásticos.
Me preocupa que toda esta campaña contra los envases alimentarios sean el árbol que no nos deja ver el bosque de los microplásticos.
Después de leer mucho sobre aditivos para detergentes y cosmética basados en microplásticos, y sobre los residuos de fibras de ropa que se desprenden en los lavados; me da miedo imaginar la cantidad de microplásticos que acaban en el mar vía alcantarillado.
Puede que sea muy simplista, pero me pregunto: ¿Es posible que el problema real de microplásticos lo tengamos en la higiene y la ropa que vestimos más que en el resto de productos de plástico? ¿Se está enfocando bien el problema? ¿Dónde está el pastel más grande?
Hablemos de mares y océanos:
Según un informe realizado por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, por sus siglas en inglés), la mayoría de los microplásticos en los océanos provienen del lavado de textiles sintéticos.
· 35% textiles sintéticos.
· 28% neumáticos (un motivo más para usar lo menos posible el coche y usar medios más sostenibles como el tren o el tranvía).
· 24% polvo de las ciudades.
· 7% señalización vial.
· 3,7% revestimiento marino
· 2% productos de cuidado personal.
De hecho ya se ha demostrado que el agua de lluvia está contaminada y por tanto están expandiéndose por todo el planeta. Se han encontrado microplásticos hasta en el Himalaya, así como en todas las principales fuentes de agua dulce.
Hablemos de la tierra
El informe Plastívoros, elaborado por Amigos de la Tierra y Justicia Alimentaria, señala que la contaminación por microplásticos en los suelos es muy superior a la existente en el mar. En concreto, la investigación cifra ésta, en hasta 23 veces superior a la del océano.
La mayor puerta de entrada de microplásticos a los suelos agrarios se encuentra en el uso de los lodos de depuradora como fertilizante, según revela la investigación. “La práctica totalidad de los microplásticos arrastrados por la actividad doméstica, industrial o agraria acaban en los lodos de depuradora y, de ahí, la inmensa mayoría son vertidos a los campos agrarios”.
Hablemos de como nos afectan estos microplásticos
Un reciente estudio holandés ha mostrado que han ‘traspasado’ la barrera, encontrándose por primera vez en la sangre humana.
En el estudio demostraba que se ha encontrado en el 77% de las personas que se estudiaron. ¿Cómo han llegado hasta ahí?
Las concentraciones de partículas de plástico encontradas, son la suma de todas las exposición potenciales.
Ingresan por el aire (al respirar), agua (al beber) y alimentos (tierra y por el agua).
Pero también productos de cuidado personal que podrían ingerirse como la pasta de dientes, pintalabios, fármacos…Se pueden encontrar hasta en residuos de tinta de tatuaje.
Ya han llegado a nuestra sangre, ¿Cómo nos va a afectar?
Algunos expertos opinan que son capaces de introducirse en nuestras células provocando cambios al bloquear o alterar procesos celulares, dando lugar a defectos en el desarrollo infantil, infertilidad, alteraciones hormonales, enfermedades autoinmunes y cáncer.
Personalmente creo que es pronto para sacar conclusiones, pero estos datos deberían hacernos reflexionar, comenzando por dejar de emplear el plástico donde no sea imprescindible y centrar la atención en todos los micro/nano plásticos que estamos usando de forma habitual y que no se están legislando.