La patronal CEOE ha dado el pistoletazo de salida a la carrera electoral para elegir al nuevo presidente y, de momento, cuenta con un único corredor, el actual presidente de la patronal de las pequeñas y medianas empresas (pymes) Cepyme, Antonio Garamendi, que ha anunciado su candidatura.
Durante la Junta Directiva celebrada, en la que se ha fijado el día 21 de noviembre como la fecha de los comicios presidenciales, Garamendi ha anunciado su candidatura, lo que ha generado reacciones de apoyo por parte de más de una veintena de organizaciones.
En su intervención, Garamendi ha manifestado su intención de defender la unidad de la patronal y de culminar el trabajo iniciado por el actual presidente, Juan Rosell, a quien ha agradecido su labor al frente de la misma en estas dos legislaturas.
Garamendi, que es percibido como el sucesor natural de Rosell, quiere aprovechar el proceso que se inicia ahora como una oportunidad para demostrar que los empresarios son "gente seria" y que saben "gestionar" sus asuntos, dicen fuentes cercanas al empresario.
Todos los miembros de la Junta Directiva que han tomado la palabra han mostrado su apoyo a Garamendi, al mismo tiempo que han expresado su reconocimiento a la labor realizada por Rosell.
"En un clima de unidad, casi rozando la unanimidad", dicen las fuentes consultadas, se ha celebrado esta Junta, en la que han intervenido apoyando al presidente de Cepyme patronales sectoriales como la constructora CNC, la automovilística Faconauto, la química Feique o la metalúrgica Confemetal.
También ha tomado la palabra el hasta ahora presidente de Foment del Treball, Joaquim Gay de Montella, quien dio marcha atrás en su intención de optar a la presidencia de la CEOE y que hoy ha aceptado la candidatura de Garamendi, tras lo que se han dado un "frío abrazo", según relatan dirigentes patronales.
Asimismo, varios representantes de organizaciones territoriales como la madrileña CEIM, la de varios representantes de organizaciones sectoriales como la andaluza CEA, la aragonesa CEOE Aragón, la valenciana CEV y la vasca ConfeBask han anunciado que respaldarán al empresario vasco.
Precisamente esta tarde tiene lugar la Junta Directiva de Cepyme, en la que está previsto que propongan presentar oficialmente la candidatura de Garamendi, en tanto que la de Confemetal, previsiblemente, tomará la misma decisión en la Junta que tendrá lugar la próxima semana.
El actual presidente de CEOE, Juan Rosell, agotará así su segundo y último mandato, tras modificar él mismo los estatutos de la patronal y acotar el tiempo máximo de un presidente a 8 años.
Aunque el proceso electoral se inicia ahora, oficialmente podrían surgir candidatos para presidir la patronal hasta una semana antes de los comicios, es decir, el 14 de noviembre, según un comunicado remitido por la CEOE.
Para entonces y según los estatutos de la CEOE, los candidatos tendrán que haber presentado sus candidaturas y depositado, al menos, 20 avales que, a su vez, sean representantes de, al menos, 4 organizaciones de pleno derecho.
Una vez fijada hoy la fecha de los comicios, la patronal comunicará el 12 de octubre a sus organizaciones miembro cuántos vocales de la asamblea general electoral tendrán y, en consecuencia, el número de votos que les corresponde, cuyos nombres deberán comunicar a la CEOE antes del 27 de octubre.
No obstante, sí se sabe que de los 740 compromisarios que votarán en las elecciones, unos 530 pertenecen a las organizaciones sectoriales y algo más de 200, a las territoriales.
Entre las organizaciones sectoriales más poderosas, destaca la patronal de las pymes Cepyme, con unos 83 electores, por delante de la patronal de las eléctricas Unesa (30) y la de la banca AEB (25), y seguida ya de lejos por la metalúrgica Confemetal, la farmacéutica Farmaindustria y la constructora CNC, todas ellas con unos 10 votos.
Entre las territoriales, sobresalen Foment del Treball y CEIM, ambas con unos 45 votantes, seguidas por la valenciana CEV, con 21.
Aunque éste es el procedimiento que está previsto en los estatutos de la CEOE, fuentes consultadas han asegurado que algunas organizaciones son partidarias de una "proclamación por aclamación" en el caso de que haya un único candidato, como parece que va a ser.
Este procedimiento, que requeriría un cambio de reglamento, evitaría que se dé una "baja participación" o un voto de castigo a Garamendi, enviando así un mensaje de unidad.
