Quince meses han bastado para empezar a entender cómo funciona esto de las pedanías, donde vive el 60% de la población del municipio de Murcia. He de reconocer que me he llevado las manos a la cabeza alguna vez que otra, pero esto formará parte de otro serial. Mucha gente pregunta si, desde la pedanía, se puede hacer política. "Claro", es mi respuesta, y desde la cercanía del ciudadano mucho más.
Habría que hacer didáctica sobre cuál es la labor de las Juntas Municipales en las pedanías y cómo se puede pasar de hacer obras, más o menos importantes, a la aplicación de políticas. Si resumimos en pocas palabras el objetivo de las Juntas Municipales, sería lograr la cohesión social de los ciudadanos de la pedanía, un objetivo que no es cualquier cosa, y que no se logra únicamente aplicando "políticas de obras” e inauguraciones.
A estas alturas de la vida deberíamos de tener muy claro que las infraestructuras deben de ser una consecuencia de la aplicación de políticas, y no al contrario, si no se tiene claro cuales son esas políticas, difícilmente vamos a realizar infraestructuras que solucionen realmente los problemas de los ciudadanos.
Las políticas culturales y sociales, son esenciales para la cohesión social, por lo tanto, identificar lo que ocurre en un pueblo, contando con los agentes culturales, sociales y económicos, y definir estas políticas en el mas amplio sentido de la palabra, debe de ser un objetivo prioritario en las pedanías.
La clave está en tener un plan a corto, medio y largo plazo y sobre todo en priorizar, en empezar a entender que no hay derechos adquiridos, y que el “siempre se ha hecho así” no significa que se tenga que seguir haciendo. Esto conlleva cambios, tomar decisiones, eso sí, con el máximo consenso. Pero teniendo claro el rumbo.
Precisamente, el cambio de políticas, debe provocar un movimiento inevitable en el “status quo” que no va a sentar bien a todo el mundo. Hay que argumentar las decisiones, pero aún así, habrá ciudadanos afectados de forma directa que no estén de acuerdo. Pero esta es la tarea esencial, mejorar la vida de los ciudadanos, pisando el terreno, conociendo la realidad y tomando decisiones sin complejos.
La didáctica y el sentido común son claves.