La mayoría de las empresas españolas declaran haber elevado los precios de venta entre abril de 2021 y marzo de este año, de forma intensa en el 27% de los casos y moderada en el 37%, y auguran que esta tendencia alcista se mantendrá en los próximos meses.
Esta es una de las conclusiones del artículo del Banco de España "Evolución económica reciente de las pymes españolas y de su acceso a la financiación externa", elaborado de acuerdo con la encuesta semestral del Banco Central Europeo y publicado este jueves.
Los factores considerados relevantes para explicar esta evolución de los precios son la inflación, mencionado por el 73% de las empresas; el aumento de los costes de los insumos (energía y otros materiales), señalado por un 71%; y el crecimiento de los costes laborales, apuntado por un 61%.
Por ramas productivas, el informe indica que todos los sectores mantuvieron una evolución positiva de sus ventas entre octubre de 2021 y marzo de 2022, aunque fue el sector industrial el que registró los incrementos más intensos (25%).
El sector servicios fue el que mostró un comportamiento menos dinámico, ya que su cifra de negocios en el citado periodo se incrementó un 2,9%, un dato "claramente inferior" al del semestre previo, cuando la subida fue del 12,2%, lo que podría deberse a las medidas de restricción a la actividad tras el repunte de las infecciones por COVID-19 durante una parte de este período.
La actividad de las pequeñas y medianas empresas españolas siguió creciendo entre octubre de 2021 y marzo de 2022, aunque a un menor ritmo que el registrado seis meses antes, debido fundamentalmente a la nueva ola de coronavirus, el repunte de la inflación, los cuellos de botella y la guerra en Ucrania.
Según el informe, para el 22% de las pymes su principal problema es el aumento de los costes de las materias primas y laborales, 7 puntos porcentuales más que en la edición anterior, mientras que el problema menos mencionado fue el acceso a la financiación, tan solo por el 7% de las empresas.
A pesar del contexto de incertidumbre, las expectativas económicas de las pymes españolas para el período comprendido entre abril y septiembre de este año son "positivas", ya que un 27,2% de ellas estiman que sus ventas crecerán en este período.
Otra de las conclusiones del artículo es que el porcentaje de pymes españolas más vulnerables habría aumentado ligeramente entre octubre de 2021 y marzo de 2022, hasta el 7%, mientras que la proporción de compañías más rentables habría mostrado un retroceso moderado, hasta el 3,7%.
Respecto a los préstamos bancarios, son la principal fuente de financiación de las pymes y la percepción sobre el grado de accesibilidad se mantuvo estable, aunque para el período de abril a septiembre de 2022 anticipan un deterioro en el acceso a la financiación, muy probablemente debido a la mayor incertidumbre generada tras el estallido de la guerra en Ucrania.
La encuesta revela que la proporción de pymes que solicitaron crédito bancario entre octubre de 2021 y abril de 2022 se mantuvo en un 22%, mientras que el 8% informó sobre dificultades para obtener financiación bancaria.