El crédito bancario concedido a familias y empresas residentes en España siguió bajando en septiembre, el 2,55% y el 4,33%, respectivamente, en comparación interanual, según los datos publicados este jueves por el Banco de España.
De esta forma, la financiación a empresas se redujo en un año en 41.557 millones de euros, equivalentes al citado 4,33%, con lo que esa cartera quedó en 918.783 millones de euros, también por debajo de los 921.129 millones que tenían concedidos un mes antes esas compañías.
También bajó en septiembre el volumen de la cartera crediticia de las familias u hogares, un 2,55% en un año y bastante menos, un 0,08%, en un mes, hasta los 685.134 millones de euros.
Dentro de esta categoría, las hipotecas bajaron un 3,46% interanual, hasta los 499.464 millones de euros, y poco más de 400 millones de euros en un mes.
Por el contrario, el crédito destinado al consumo aumentó un 2,3% en un año y algo menos de 200 millones de euros en comparación con el mes de agosto, hasta quedar en 97.342 millones.
Según explicaba la última Encuesta de Préstamos Bancarios del Banco de España, correspondiente al tercer trimestre del año, las razones de esta evolución serían las recientes subidas de los tipos de interés en la zona del euro, -ahora frenadas- que han seguido encareciendo la oferta y también han contribuido a enfriar la demanda.
De esta forma, entre julio y septiembre tanto los criterios de concesión de la financiación como las condiciones generales aplicadas a los nuevos préstamos se endurecieron de forma generalizada por sexto trimestre consecutivo.
También bajaron las peticiones de fondos, lo que se debe, dice el informe, al aumento de los costes de financiación, aunque en el caso de los hogares, la caída de la demanda también se apoyó en la menor confianza de los consumidores, el mayor uso de los ahorros que tenían acumulado y las peores perspectivas sobre el mercado de la vivienda. En el segmento de crédito a las empresas, la demanda también disminuyó por las menores inversiones, añade el informe.