Según el Observatorio Sectorial DBK de INFORMA (filial de Cesce), líder en el suministro de Información Comercial, Financiera, Sectorial y de Marketing en España y Portugal, el valor del mercado de transporte de viajeros por carretera aumentó un 24% en 2021, hasta 2.300 millones de euros, mientras que los datos provisionales para el cierre de 2022 apuntan a unos 3.100 millones, un 35% más que en 2021.
El levantamiento de las restricciones a la movilidad y la mejora del poder de compra de los usuarios de servicios regulares y no regulares, así como la recuperación del número de turistas extranjeros se encuentran entre los factores que propiciaron esta recuperación, en un contexto en el que la subida del precio de los carburantes provocó un cierto desplazamiento de viajeros hacia los medios públicos de transporte. A pesar del fuerte crecimiento en la cifra de negocio, el valor del mercado todavía no alcanzó el nivel de 2019, cuando se situó en 3.650 millones de euros.
En términos de número de viajeros, el segmento de transporte regular de uso general recuperó el nivel de los 500 millones en 2021, tras aumentar un 25%, con un sensible crecimiento tanto del servicio de cercanías, como, especialmente, de los servicios de media y larga distancia.
El servicio de transporte especial (transporte escolar y laboral) contabilizó un ascenso del 41%, hasta los 298 millones de viajeros, impulsado por la demanda escolar. Por su parte, el servicio de transporte discrecional alcanzó la cifra 67 millones de usuarios, habiendo crecido un 35,5%, aunque manteniéndose muy por debajo de los más de 200 millones anuales que se venían registrando antes de la crisis sanitaria.
El sector sigue presentando una tendencia de progresiva concentración, de forma que desde el año 2000 han desaparecido cerca del 30% de las empresas. En enero de 2022 se encontraban autorizadas para la prestación de servicios públicos 3.160 compañías. La tendencia de concentración se refleja en el aumento de la cuota de mercado conjunta de los principales operadores, de forma que los diez primeros reunieron ya en 2021 algo más de la mitad del volumen de negocio sectorial.
El número total de vehículos autorizados para el servicio público se situó en 44.141 a comienzos de 2022, de forma que la flota media siguió creciendo, situándose ya en el entorno de los 14 autobuses por empresa. Sin embargo, las dos terceras partes de las compañías cuentan todavía con diez vehículos o menos. En cambio, se identifica algo más de un centenar con más de 60 autobuses.