Hay una época del año en que solemos hacer un análisis de nuestro entorno y, a veces, nos damos cuenta que es necesario un cambio. En las empresas este “cambio” conlleva hacer partícipe al equipo para asegurarnos que todos vamos a una y que todos promoveremos estas mejoras. Pero, ¿cómo hacerlo?
Dale Carnegie estableció unos parámetros y un orden para conseguirlo con éxito. Os hago un breve resumen por si estáis en esta situación.
- Paso 1: Establecer una Motivación. El verdadero cambio comienza en el punto donde la organización encuentra la motivación para hacerlo. Implica a tu equipo, explícales por qué y transmíteles entusiasmo.
- Paso 2: Analizar la Situación. Los líderes deben realizar un análisis exhaustivo de los riesgos y de las oportunidades asociadas con la propuesta del cambio como los beneficios que reportará, qué costes supondrá, qué riesgos contemplará si no se realiza...
- Paso 3: Planificar. Muchas de las iniciativas organizacionales no funcionan porque la planicación es pobre. Debe establecerse un planning para la ejecución. Los elementos claves de la planicación es establecer qué impacto tendrán sobre los individuos y los sistemas y procesos más afectados.
- Paso 4: Implementar a corto, medio o largo plazo. Dependiendo del tipo y el alcance del cambio, la implementación debe ser gradual o abrupta. Cambios, como por ejemplo despidos o ingresos muchas veces son implementadas con poca antelación, mientras que las reorganizaciones del personal, reorganización o cambios tecnológicos pueden ser realizados en un período de tiempo mucho más largo.
- Paso 5: Revisar. Una vez que el cambio se ha implementado, los resultados de la nueva estructura y el sistema deben ser monitoreados. Los cambios no se desarrollarán exactamente como estaba previsto, y todas las personas afectadas por el cambio no van a reaccionar como se esperaba. El rol de los líderes es observar y revisar los puntos de referencias que revelarán si el cambio está funcionando y está produciendo los resultados deseados.
- Paso 6: Adoptar y ajustar. Cuando la implementación ha sido revisada y ha salido según lo previsto, el nuevo concepto, la propuesta o el proceso es adoptado por el grupo de trabajo y se convierte en parte de los procesos de la organización.
Es imprescindible revisar el plan para medir el éxito del cambio propuesto.
Si el proceso de revisión concluye en que el cambio no funciona como se lo planeó, será necesario realizar ajustes en la implementación. Suponiendo que el análisis del cambio y el plan han sido ejecutadas con precisión, entonces los ajustes se centrarán en como implementarlos.