La última de las charlas que organizamos en Dale Carnegie fue especial e hizo reflexionar a más de uno. Bajo el título 'Rethinking the Multigenerational Workforce' hablamos sobre el cambio de paradigma que deberán afrontar las organizaciones.
Verán, la esperanza de vida va aumentando año tras año. Un niño nacido en Japón en 2007, puede vivir más allá de los 107 años. Apliquen este principio a la mayoría de países desarrollados del mundo y multiplíquenlo por millones. Se darán cuenta que será inviable trabajar hasta la jubilación actual por varias razones.
La primera de ellas, económica. Las economías necesitarán que los trabajadores mayores trabajen más tiempo para financiar las pensiones.
Por otro lado, mientras las personas mayores se sientan útiles, sean tratadas de manera justa y tengan un sentido de pertenencia, aceptación y aprecio, estará listas para trabajar y, muy probablemente, querrán hacerlo.
Esto, sin duda, requerirá que las empresas y organizaciones aprendan a liderar con equipos multigeneracionales y no será fácil porque esto requerirá un cambio de mentalidad. Hasta ahora, la mayoría de las personas pasaban por un patrón bastante secuencial en sus vidas: la educación era para los jóvenes, el trabajo era para los adultos y el ocio (jubilación) era para las personas de mayor edad.
Pero ese patrón ha cambiado y, actualmente, las personas trabajan más tiempo, ya sea por elección o por necesidad. Sin embargo, la discriminación contra las personas mayores es común y generalizada y mayor a otras discriminaciones como las que sufren las minorías y las mujeres.
La principal limitación de los equipos multigereneracionales son los conflictos y malentendidos con los gerentes más jóvenes. Los gerentes más jóvenes no saben realmente cómo manejar a los trabajadores mayores, y los trabajadores de más edad no saben cómo obtener lo que necesitan de sus gerentes más jóvenes.
El reto ya está aquí. Las organizaciones y los líderes deberán encontrar fórmulas para gestionar y motivar a equipos con formas distintas de pensar, de ejecutar el trabajo y ajustarse a las prioridades de cada generación.