viernes. 27.12.2024

El Consejo de Economistas ha advertido este miércoles de que el año "no empieza bien", como apuntan los datos de gasto con tarjeta o movilidad, por lo que el primer trimestre podría cerrar con crecimiento plano e incluso, en un escenario pesimista, con una nueva contracción económica.

 

Durante la presentación del observatorio financiero 'Informe Enero 2021' del Consejo General de Economistas (CGE), el presidente de la Comisión Financiera del Consejo General de Economistas, Antonio Pedraza, ha señalado que "no es descartable una caída en el primer trimestre", ya que, en su opinión, el avance del 0,4 % del cuarto trimestre de 2020 "está cogido con alfileres".

 

"La situación vuelve a ser complicada", con confinamientos "prácticamente totales" en algunas comunidades autónomas que afectan mucho a la economía en un entorno de elevada incertidumbre.

 

Pese a la mejora de las perspectivas económicas por el avance de la vacunación, el Consejo mantiene su previsión de que la economía española crecerá este año un 5,5 % gracias al impacto de los fondos europeos -que cifra en el 1 % del PIB- y avanza un repunte del 4,8 % en 2022 una vez que se implementen los proyectos y reformas.

 

Según sus cálculos, en 2021 el déficit se situará en el 9,4 % del PIB debido al impacto de los gastos derivados de la pandemia para después corregirse al 8 % del PIB en 2022, mientras que la deuda pública alcanzará el 121 % del PIB en 2021 y el 122 % del PIB en 2022.

 

Precisamente los grandes problemas de cara al futuro, ha advertido Pedraza, son la sostenibilidad de la deuda, las pensiones y el déficit, cuyo componente estructural podría superar ya el 6 % del PIB.

 

Junto a ello, Pedraza ha aludido a los vencimientos de créditos y moratorias sobre el pago de alquileres e hipotecas que podrían constituir un "detonante", así como al efecto de la persistencia de la pandemia sobre el turismo, cuya recuperación no prevé hasta "2022 o 2023".

 

El economista José María Gay de Liébana, que ha participado en el evento, ha advertido de que "la andadura que tenemos por delante va a ser muy complicada", sobre todo por la dependencia de los servicios y en particular el turismo, que ha sido el ámbito "más castigado" por la pandemia.

 

A este elemento, que también repercute en la tasa de desempleo, ha añadido que España ha dedicado menos recursos a ayudas directas a las empresas que otros países y acumulaba una menor inversión en sanidad.

 

Gay de Liébana cree que el efecto de los fondos europeos será "mínimo" ya que, por una parte, se quedará en las grandes empresas sin "calar" a las pymes, y, por otro, pone en duda tanto la capacidad de gestionar los recursos como las "condicionalidades" que pueda exigir Europa.

Los economistas ven con pesimismo el arranque del primer trimestre