José María Albarracín, líder de los empresarios de la Región de Murcia, comienza la década igual que concluye la que termina: exigente y reivindicativo con las instituciones en defensa del colectivo que representa. El presidente de la CROEM anuncia que centrará el nuevo año en la “defensa a ultranza del trasvase Tajo-Segura, un baluarte económico y de empleo para esta tierra. No hay alternativa: el trasvase es necesario sí o sí”.
Albarracín tampoco oculta la “incertidumbre” que provoca en el seno empresarial la inminente formación del Gobierno del estado, con Pedro Sánchez (PSOE) como presidente y Pablo Iglesias (Podemos) como vicepresidente, y las medidas que afecten a los empresarios, como la anunciada subida del SMI o la derogación de la Reforma Laboral. Para el empresario, las decisiones que tomen pueden afectar de forma más o menos decisiva a la creación de empleo.
Uno de los grandes proyectos de la CROEM para este próximo año será la creación de una Mesa del Turismo, que tendrá como objetivo “explotar nuestro fantástico arsenal turístico para poner a la Región en el punto en el que se merece dentro del panorama nacional e internacional”. Además de las excelentes condiciones naturales, Albarracín recuerda que la Región cuenta con un aeropuerto estrenado hace menos de un año y que persiste la ya histórica reivindicación del tren de Alta Velocidad, así como el resto de las infraestructuras básicas que los empresarios llevan lustros reclamando.
Una vez más los empresarios se ponen al frente de una iniciativa, en este caso en el sector del turismo, que nace a imagen y semejanza de cómo nació hace unos años la Mesa del Agua, también impulsada desde la Patronal.
Además, el presidente la CROEM anticipa que la Patronal continuará en su reivindicación de que se cree la agencia medioambiental (también conocida como Arca), que serviría para apuntalar las dos leyes de simplificación administrativa que el Gobierno de López Miras ha aprobado a iniciativa de los empresarios en los últimos dos años y que han servido para dinamizar la industria murciana.
Todo ello después de un 2019 que “ha sido un año globalmente preocupante, porque hemos tenido una gran incertidumbre política, hemos tenido el problema añadido del Brexit que parece que finalmente entra en el buen camino, y las sanciones de la administración Trump, que podían amenazar las exportaciones regionales y nos han tenido muy preocupados, aunque parece que finalmente se está llegando a un entendimiento entre Estados Unidos y China”.
EL ACUERDO PSOE-PODEMOS. Este lunes, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias han presentado el programa de gobierno que pondrán en marcha si finalmente logran la investidura, como parece que ocurrirá de manera inminente. En este acuerdo entre el PSOE y Podemos, se contemplan algunas medidas como la subida del Salario Mínimo Interprofesional o la derogación de la Reforma Laboral, así como la subida de algunos impuestos que apuntan directamente a la actividad empresarial y a las grandes fortunas. Sobre dicho documento, Albarracín afirma que “tenemos que analizarlo en detalle, pero puedo decir que los empresarios como agentes sociales de la representatividad económica, y espero que también los sindicatos, no permitan que se imponga ninguna medida sin haber escuchado antes la postura de estos colectivos”.
EL MAR MENOR. El estado del Mar Menor también es un motivo de preocupación para los empresarios murcianos. “Lo hemos dicho por activa y por pasiva, los empresarios estamos para colaborar y ayudar, siempre escuchando a los técnicos para que sea una recuperación real. Todo lo que sea lucha política la condenamos con rotundidad”, asevera Albarracín.
Con respecto a las previsiones para el próximo verano, pensando en el sector de la hostelería y el turismo, Albarracín no esconde que “no pintan bien, pero estamos a tiempo de cambiar la inercia. Podemos establecer unas bases sólidas gracias a la nueva Mesa del Turismo”.
