viernes. 22.11.2024

El 72 % de las pymes de la Región de Murcia poseen guías o manuales orientativos para mejorar la implantación de la Responsabilidad Social Corporativa (RSC), mientras que el 85% de las firmas sondeadas manejan el concepto, según la primera encuesta de este tipo, ‘Barómetro de la RSC en la Región de Murcia’, llevada a cabo por el Instituto de Fomento (Info) y la Universidad de Murcia (UMU)

 

Según el director del Info, Joaquín Gómez, que presentó el análisis junto con el director general de Economía Social y Trabajo Autónomo, Antonio Pasqual del Riquelme, “en los últimos años la RSC ha calado enormemente en la gran mayoría de nuestras pymes, proceso acelerado con la crisis provocada por la Covid-19 y el cambio climático”.  

 

Destacó “el compromiso corporativo que se está llevando a cabo en el ámbito del medio ambiente”, y citó como ejemplo “los esfuerzos para reducir el impacto medioambiental de sus actividades (4,2 sobre 5) y realizar inversiones para ahorrar energía (4,1 sobre cinco), así como otras prácticas”. 

 

La encuesta se realizó poco antes del verano de 2021 bajo la supervisión de los profesores de la Universidad de Murcia Longinos Marín y Pedro J. Cuestas, de la Cátedra RSC de la UMU, que elaboraron el posterior informe. En la encuesta se recabó información de un total de 128 empresas, que en general no son empresas familiares, pertenecen eminentemente a los sectores de servicios e industrial, y operan en sectores maduros. 

 

Según el Barómetro, el objetivo principal para el 58% de ellas es la satisfacción del cliente y para el 23% la creación de bienestar para la sociedad. La pandemia ha hecho que el 48% de las empresas cambien sus objetivos de RSC, y dos de cada cinco empresas (38%) destina más recursos a la RSC ahora con respecto a antes de la pandemia.

 

La mayor parte del incremento de esta inversión en RSC se ha destinado a la plantilla (41,4%) y el medio ambiente (38,3%). 

 

Las tres prácticas que más se realizan con respecto al personal son tratar a la plantilla equitativa y respetuosamente, sin tener en cuenta el género o la etnia a la que pertenece; formar sobre prevención de riesgos laborales (ambas con un nivel de implantación de 4,4 sobre 5); y apoyar a los empleados que quieran seguir formándose (4,2 sobre 5). 

 

Por lo que concierne a la RSC en su relación con los clientes, las prácticas que más se realizan con clientes son respetar la privacidad y dar respuesta a las quejas y sus sugerencias (ambas valoradas con un 4,5 sobre 5), y las que menos son incorporar los intereses de los clientes en sus decisiones empresariales (4,2 sobre 5) y realizar encuestas de satisfacción (3,8 sobre 5). La media del nivel de implantación de todas las prácticas con cliente se sitúa en un 4,3 sobre 5. 

 

Además, en el ámbito local donde operan las firmas, la actitud más destacada es considerarse parte de él, preocupándose por su desarrollo (4,1) y mantener relaciones transparentes con políticos locales (4). Las prácticas que menos se realizan son apoyar y dar dinero para actividades culturales o deportivas en su comunidad (3,8) y tener programas de apoyo e integración de grupos desfavorecidos (3,6). La media del nivel de implantación de todas ellas se sitúa en 3,9 sobre 5. 

 

El propio Instituto de Fomento desarrolla su estrategia de RSC basada en la responsabilidad ambiental, la valoración del impacto de sus actividades, la mejora de las condiciones laborales de sus trabajadores y el mantenimiento de una ética profesional. En este marco, el Info está adherido al Pacto Mundial de las Naciones Unidas para luchar contra el cambio climático. 

El 72% de las pymes de la Región desarrolla memorias RSC para mejorar su implantación