La Comunidad ha lanzado una convocatoria de ayudas por valor de 300.000 euros para prestar orientación laboral a personas en paro que presenten una discapacidad física y/u orgánica. Los beneficiarios serán asociaciones especializadas en acercar al empleo a este colectivo, que con la subvención podrán asumir los costes del personal técnico contratado en sus gabinetes de orientación e inserción laboral.
La convocatoria, que ha sido publicada en el BORM y cuyo plazo de solicitudes se encuentra abierto hasta el 7 de junio, tiene como objetivo la prestación de un asesoramiento individualizado a personas con dificultades específicas para acceder al mercado laboral. Así, se busca que sean precisamente las asociaciones más familiarizadas con estas personas las que, con procedimientos marcados por el SEF, ofrezcan las herramientas y recursos que mejor se adapten a cada perfil.
De este modo, la Comunidad asume los costes laborales de profesionales que ejercerán labores de intermediación, de orientación y de prospección del mercado de trabajo para estos desempleados. Igualmente, los gabinetes ofrecerán diferentes técnicas para la búsqueda de empleo, impartirán talleres centrados específicamente en la orientación laboral y llevarán a cabo un análisis de los nichos que ofrecen mejores perspectivas para sus colectivos concretos.
La secretaria general de la Consejería de Empleo, Universidades, Empresa y Medio Ambiente, Pilar Valero, destacó que estas subvenciones “van a permitir a los desempleados con discapacidad recibir un servicio de orientación laboral y asesoramiento completamente adaptado a sus circunstancias particulares, impartidos por técnicos de las asociaciones que conocen exactamente sus principales dificultades y cuáles son los factores más importantes para conseguir un puesto de trabajo”.
El personal de estas entidades elaborará itinerarios de inserción laboral personalizados, establecerá un seguimiento pormenorizado de cada usuario y fijará medidas de acompañamiento necesarias para el incremento de competencias y de hábitos en la búsqueda activa de empleo, de cara a la inserción final.
COLABORACIÓN CON EL SEF. Entre el SEF y las asociaciones beneficiarias se establecerá un cauce de colaboración de cara a que a las entidades apliquen la metodología y las herramientas del SEF para la orientación laboral. Así, las entidades, a través de sus orientadores laborales, deberán informar al SEF de las altas en sus gabinetes, de las atenciones y de las distintas actuaciones que desarrollen.
Esta iniciativa se centra específicamente en los desempleados con discapacidad física y/u orgánica. La discapacidad física presenta limitaciones en la realización de movimientos, aunque también pueden estar afectadas otras áreas como el lenguaje o la manipulación de objetos. En el caso de la discapacidad orgánica, son los órganos internos los dañados, en enfermedades como por ejemplo la fibrosis quística o las cardiopatías.
La dotación presupuestaria se mantiene con respecto a la convocatoria de 2018, cuyas ayudas fueron a parar a la Federación de Asociaciones Murcianas de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (Famdif), con 270.000 euros, y a la Asociación Nacional para Problemas de Crecimiento (Crecer), con 30.000 euros.