El grupo español BBVA obtuvo un beneficio atribuido de 3.311 millones de euros hasta septiembre, frente a las pérdidas de 15 millones registradas un año antes por las dotaciones para hacer frente a la pandemia de coronavirus, ha informado este viernes la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Este resultado incluye los impactos no recurrentes del periodo, como los 280 millones de euros generados en la primera mitad del año por BBVA USA y el resto de sociedades vendidas a PNC, o los costes netos de la reestructuración en España, que sumaron 696 millones de euros.
El beneficio recurrente del periodo, es decir, el que no tiene en cuenta los citados extraordinarios y refleja el puro negocio, casi se duplicó y sumó 3.727 millones (+85%), en tanto que en el tercer trimestre estanco, el atribuido fue de 1.400 millones de euros, uno de los más elevados de la historia de la entidad.
Según explica el banco, este resultado ha sido posible gracias a la evolución mejor de lo esperado de los saneamientos crediticios, que bajaron un 46,2%, y también a la menor necesidad de dotación a provisiones, que se redujeron un 72%.
Todo esto permite al BBVA hacer una recompra de acciones de hasta el 10% de su capital, por un importe máximo de 3.500 millones de euros, según ha anunciado también hoy a la CNMV tras recibir la autorización del Banco Central Europeo (BCE).
Los depósitos de la clientela aumentaron un 4,4%, hasta 340.828 millones de euros. Asimismo, el grupo captó cerca de 2,5 millones de nuevos clientes a través de la aplicación para el móvil y su web (un 48% más), lo que eleva la cifra de clientes digitales a 40,1 millones y la de clientes totales, a 80,1 millones (un 3,3% más).
