CaixaBank ha ratificado los Principios de Banca Responsable de Naciones Unidas, lanzados oficialmente este domingo en Nueva York por la Iniciativa Financiera del Programa de la ONU para el Medio Ambiente (UNEP FI, por sus siglas en inglés). Estos Principios tienen como objetivo enfocar la actuación del sector financiero hacia la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas y los Acuerdos de París contra el cambio climático.
Las entidades financieras desarrollan un rol crucial para respaldar y acelerar la transición hacia una economía y un modo de vida más sostenibles, gracias a su función clave como proveedores de financiación a nivel mundial. Además, los Principios de Banca Responsable proporcionan el marco para el sistema bancario sostenible del futuro y ayudan al sector a plasmar su contribución positiva a la sociedad.
Para Jordi Gual, presidente de CaixaBank, “necesitamos entidades financieras que sean conscientes de que sus actuaciones inciden de forma directa en el bienestar social y que adopten compromisos éticos y sociales con los territorios en los que están presentes”. En este sentido, Jordi Gual ha recordado que “a lo largo de su centenaria historia, CaixaBank siempre se ha diferenciado por buscar soluciones a los retos sociales más urgentes y contribuir a construir un mundo más sostenible y socialmente inclusivo para las generaciones actuales y futuras”.
Por su parte, el consejero delegado Gonzalo Gortázar ha señalado que “en CaixaBank somos conscientes de la enorme responsabilidad de la banca en la transición hacia un mundo más sostenible. Por ello, estamos absolutamente comprometidos con la inclusión y la cultura financiera y, por supuesto, con el medio ambiente”. “Somos un referente en banca socialmente responsable por nuestros orígenes y por nuestra vocación social, y un aliado de Naciones Unidas en la consecución de sus Objetivos de Desarrollo Sostenible”, ha concluido Gonzalo Gortázar.
Los Principios de Banca Responsable de UNEP FI fueron definidos a finales de 2018 y estuvieron sometidos a un proceso de consulta pública hasta el pasado mes de mayo. En ese periodo, entidades de todo el mundo –incluida CaixaBank- se adhirieron a la iniciativa, que se ha ido perfilando hasta culminar en el documento final que se ha lanzado hoy en la sede central de Naciones Unidas.
