El BBVA celebrará su Junta General de Accionistas el próximo 20 de abril. Debido a las excepcionales circunstancias derivadas de la pandemia, este año la Junta será 100% telemática. El banco habilitará los canales necesarios para facilitar que los accionistas puedan ejercitar sus derechos.
La entidad ha publicado los puntos del orden del día que se someterán a la aprobación de sus accionistas, entre los que destacan los siguientes:
Respecto a la remuneración al accionista, la entidad propone pagar, en abril, un dividendo en efectivo de 5,9 céntimos de euro brutos por acción. Este importe corresponde a un ‘payout’ del 15% sobre los resultados del año 2020, el máximo permitido por el supervisor para ese ejercicio.
Respecto a 2021, y con el fin de retomar su política de dividendos clara, predecible y sostenible, la entidad propone a la JGA que la cantidad a repartir como primer dividendo en efectivo sea de un importe máximo del 35% del beneficio del grupo del primer semestre, sin incluir extraordinarios. Este primer dividendo de 2021, que tentativamente se pagaría en octubre, estará sujeto a que se levanten las restricciones regulatorias respecto a la remuneración a los accionistas, que actualmente están en vigor hasta septiembre.
Con el fin de poder implementar una potencial recompra de en torno al 10% de las acciones, objetivo que la entidad ya había anunciado, el banco somete a la aprobación de los accionistas la posibilidad de llevar a cabo una reducción de hasta un máximo del 10% del capital social de la entidad, equivalente a unos 667 millones de acciones. Una vez aprobado este punto del orden del día por la JGA, el Consejo podrá o no ejecutar la recompra y posterior amortización, en una o varias veces. Esta potencial recompra se realizaría tras el cierre de la venta de la filial en Estados Unidos, que se espera para mediados de año, y siempre sujeto a las condiciones de mercado (el precio de la acción, entre otros) y a que se obtengan las autorizaciones necesarias de los supervisores.
BBVA propone a sus accionistas reelegir como consejeros a José Miguel Andrés, Jaime Caruana, Belén Garijo, José Maldonado, Ana Peralta, Juan Pi y Jan Verplancke. La actual composición del Consejo, que cuenta con dos tercios de consejeros independientes, combina perfiles con un profundo conocimiento y experiencia dilatada en áreas clave (banca, estrategia, macroeconomía, sostenibilidad, innovación, tecnología, entre otros), un 40% de miembros de nacionalidad extranjera y un tercio de mujeres en su máximo órgano de decisión. El banco tiene como objetivo, de acuerdo con la política aprobada por el Consejo, contar con al menos un 40% de mujeres en el Consejo antes de que finalice 2022. Entre otros puntos del orden del día, el banco someterá asimismo a la votación de sus accionistas:
- La aprobación de las cuentas anuales, informe de gestión y estado de información no financiera del 2020, tanto de BBVA, S.A. como del Grupo consolidado.
- La aprobación de la aplicación del resultado y de la gestión social del 2020.
- La aprobación de la Política de Remuneraciones de los Consejeros para los años 2021, 2022 y 2023, cuyas principales novedades ya se destacaron en febrero cuando se publicó el informe anual sobre remuneraciones.
- La reelección de KPMG para la auditoría del ejercicio 2021.
- La aprobación de un nivel máximo de remuneración variable (de hasta el 200% de la remuneración fija) para el colectivo de empleados cuya actividad incide significativamente en el perfil de riesgo del banco (los denominados ‘risk takers’).
- La delegación en el Consejo de la facultad de emitir valores convertibles en acciones (conocidos como AT1 o CoCos) durante un plazo de cinco años hasta un importe máximo de 8.000 millones de euros, que sirva para atender las necesidades de emisión de este tipo de instrumentos que pueda tener el banco durante dicho horizonte temporal. No obstante, el plan de financiación del banco prevé moderar el ritmo de emisiones de deuda en 2021 (sin que esté previsto refinanciar las amortizaciones anticipadas de AT1 que se produzcan en 2021), por el impacto positivo, tanto en liquidez como en capital, que supondrá el cierre de la venta de la filial en Estados Unidos, aunque este plan se irá adaptando a las decisiones que la entidad vaya tomando respecto al exceso de capital generado con dicha venta.
- La actualización de los Estatutos Sociales de la entidad, así como el reglamento de la Junta General de Accionistas, para que el formato de las juntas sea flexible (presencial, híbrido o, en circunstancias extraordinarias, 100% telemático).