Si bien la dieta mediterránea tiene todo lo necesario para cumplir con esos requisitos, nunca está de más incluir algún alimento adicional con propiedades probióticas que dé al organismo lo que le hace falta para encontrarse en un estado óptimo.
Qué probióticos incluir en tu dieta
Hay un amplio repertorio de alimentos probióticos con propiedades muy interesantes. “Alimentos como el yogur natural, la soja fermentada, el chucrut, el kéfir o algunos encurtidos son grandes aliados para aliviar algunos síntomas del estreñimiento, prevenir enfermedades cardiovasculares, reducir la probabilidad de desarrollar obesidad o evitar la proliferación de bacterias, algunas de las cuales son dañinas para el organismo”, explican los expertos en probióticos.
Y es que esta clase de alimentos también son una ayuda a la hora de controlar el colesterol, mejorar la asimilación de nutrientes y contribuyen a la prevención de intolerancias alimentarias.
“Las vitaminas K o B12 se asimilan mejor si la ingesta de alimentos probióticos es regular, y lo mismo ocurre con el hierro o el calcio”, explican. “Los alimentos probióticos son una ayuda importante para mejorar el estado de la microbiota y preservar la flora intestinal en buen estado, optimizando los procesos digestivos y haciendo que la metabolización que lleva a cabo el organismo se lleve a cabo de manera íntegra y correcta”, añaden los profesionales de la plataforma especializada en la venta de probióticos, prebióticos y complementos alimenticios en general ValentiaBiologics.com, líder en su segmento y con un amplio repertorio de productos procedentes de los laboratorios más prestigiosos del sector.
Además del kéfir, el chucrut o algunos encurtidos, el queso crudo, el pan de masa madre o el suero de mantequilla son alimentos que pueden disfrutarse en muchas clases distintas de platos y que tienen unas propiedades probióticas más que interesantes. De hecho, no solo el queso crudo, sino todo queso elaborado con leche de animales de pasto, como la vaca, la cabra o la oveja, tienen propiedades probióticas que pueden ser aprovechadas mientras se disfruta de un alimento muy rico desde el punto de vista nutricional y del sabor.
Qué nutrientes aportan los alimentos probióticos a tu organismo
Aparte de formar parte del grupo de alimentos con propiedades probióticas, los alimentos que han señalado los expertos cuentan con una serie de nutrientes que los convierten en opciones muy convincentes para quienes quieran enriquecer aún más su dieta.
“Sabemos que el chucrut es un alimento rico en vitamina C, ácido fólico, hierro y fibra, que la kombucha contiene un elevado contenido en vitamina B12, que el miso contiene los 9 aminoácidos esenciales, junto con dosis importantes de vitamina K y potasio, que el kimchi es rico en minerales, aminoácidos, proteínas y vitaminas A, B y C, y que el kéfir de agua y de leche tienen altos índices de vitamina B12 y vitamina D, respectivamente”, comentan los profesionales que conocen a fondo las propiedades de estos alimentos.
Otros alimentos conocidos por su potencial probiótico, como el suero de mantequilla, muy usado en repostería, también son muy interesantes nutricionalmente hablando, con elevados contenidos de vitamina B12 y siendo una fuente de calcio y fósforo inestimable”.
Especialmente atractivo es el pan de masa madre, que aporta importantes cantidades de vitaminas B1 a B6, vitamina B12, ácido fólico, vitamina E, hierro, calcio, fósforo, magnesio, potasio, zinc y lactobacilos.
Efectos de los alimentos probióticos en el organismo
Está claro que los alimentos probióticos son beneficiosos ingeridos dentro del marco de un estilo de vida saludable y el seguimiento de una dieta equilibrada. Pero, más allá del mero aporte de nutrientes, el consumo de estos alimentos es capaz de reportar otros efectos colaterales positivos que conviene tener en cuenta, a tenor de lo que expone el equipo de Muytop.top en su post relacionado con los beneficios de los probióticos.
“Estos alimentos pueden ser de ayuda para combatir los desajustes en los niveles de glucosa en sangre, combatir ciertas dolencias hepáticas relacionadas con el seguimiento de una dieta desequilibrada y pueden ayudar a minimizar el riesgo de sufrir los efectos de un resfriado”, explican los profesionales que conocen bien las propiedades de estos alimentos.
No obstante, desde Muytop insisten en recordar que algunos probióticos pueden tener efectos secundarios indeseados. “Hablamos sobre todo de gases y sensación de hinchazón, aunque es algo extraño y que ocurre con poca frecuencia”. Por eso, es altamente recomendable permanecer atento a las señales que pueda dar el cuerpo y hacer un seguimiento de cualquier molestia tras la ingesta para poder establecer una relación causal entre el tipo de alimento consumido y los síntomas.
“Algunos probióticos pueden causar, además, ligeros dolores de cabeza, así como aumentos espontáneos de los niveles de histamina en el tracto digestivo. Es vital, por tanto, que aquellas personas con alergias alimentarias extremen las precauciones y dispongan siempre de su dispositivo autoinyectable para prevenir los efectos causados por un hipotético choque anafiláctico”, sentencian.
