viernes. 22.11.2024

Con consumidores cada día más informados y nuevas tendencias de consumo responsable, las certificaciones alimentarias en el sector agrario se han convertido en una necesidad para las empresas del sector.

 

Estos controles permiten a las emprensas posicionarse en el mercado con un producto más seguro y obteniendo valor añadido, por tanto da una característica diferenciadora frente a la competencia, permitiendo acceder a distintos mercados y reportando una mayor rentabilidad total.

 

La certificación es una garantía por escrito que da una agencia certificadora independiente y que asegura que el proceso de producción o el producto cumplen con los requisitos que establecen las diferentes organizaciones o países. Este tipo de certificación sirve para demostrar que un alimento se ha producido de una determinada manera o que posee unas determinadas características.

 

Pueden optar a la certificación todas aquellas empresas que elaboren alimentos, bien como producto final o bien como producto intermedio, dirigidos a la alimentación humana y/o animal. Eso si, según el país de destino de las exportaciones de los alimentos, las certificaciones que se exigen pueden ser de diferentes tipos, por ejemplo BRC, IFS, ISO 22000 o EUREP.

 

La seguridad alimentaria y la excelencia en los productos que se comercializan parece estar a la orden del en las exportaciones agrarias, Juan José Martinez, director de la Cátedra de Agricultura Sostenible del Campo de Cartagena cuenta que “los agricultores de la región están muy concienciados con hacer las cosas bien. Desde nuestra Cátedra, por ejemplo, estamos haciendo grandes avances en investigación de eliminación de salmuera y desnitrificación. Una manera para hacer la agricultora mas sostenible y como consecuencia hacer el producto final que llega al consumidor sea de excelente calidad”.

 

La Cátedra de Agricultura Sostenible está formada por Fecoam y Coag en colaboración con la UPCT y con la participación de trece empresas y cooperativas agrícolas, (Coagacart; Levante Sur; Fruveg; Gregal; Hortamira; La Pacheca-Spalm; Sociedad cooperativa Cota 120; Agricultura y Exportación; San Cayetano; Camposeven; Agrícola del Sureste; Sol y Tierra Campo De Cartagena y Surinver).

 

Todas y cada una de ellas cuenta con distintos certificados alimentarios, por ejemplo Hortamira cuenta con normas y protocolos, como GlobalGap, GlobalGap Grasp, B.R.C., I.F.S., QS, Naturland, Certificación Agricultura Ecológica, UNEEN, ISO 14001:2004.

 

Soltir ofrece garantías en seguridad alimentaria y trazabilidad que certifican normas de calidad GlobalGap, ISO 9001, 14001, BRC,. GRASP. Gregal está certificada en Normas de Seguridad Alimentaria como GlobalG.A.P. y BRC desde el año 2003, QS, desde 2015 y IFS, actualmente en fase de implantación y San Cayetano, está certificado con el “Global Standard for Food Safety” desde 2015, “IFS Food” desde 2014 y ISO 14001: 2015.

 

La importancia de las certificaciones alimentarias en la agricultura