La moción de censura que llevará a Ana Martínez Vidal a ser la próxima presidenta de la comunidad autónoma previsiblemente el próximo 18 de marzo ha generado un terremoto político en toda España que va a tener consecuencias que se van a notar en todo el país.
Como primera consecuencia, la presidenta autonómica de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, reaccionó convocando elecciones en la comunidad para el próximo 4 de mayo, adelantándose así por pocos minutos a las mociones de censura presentadas por la oposición madrileña.
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Pero, además, en Castilla y León, el PSOE y el partido Ciudadanos, liderado allí por Paco Igea, presentaban una nueva moción de censura contra el popular Alfonso Fernández Mañueco, y es previsible que también se salde con un cambio de gobierno.
Ahora, todos los ojos miran a Andalucía, donde el PP también gobierna con Ciudadanos, en lo que significó un cambio político tras casi tres décadas de victorias socialistas. Allí, por el momento no hay novedad, ya que el vicepresidente, Juan Marín (Cs) ha afirmado que no habrá 'efecto dominó' y por tanto el presidente Juanma Moreno (PP) puede seguir tranquilo.
LAS GRANDES CIUDADES. En el ayuntamiento de Madrid, el alcalde Martínez Almeida (PP) también ha recibido una llamada de la vicealcaldesa Begoña Villacís (Cs) confirmándole que tampoco habrá cambios en el palacio consistorial.
Otras grandes ciudades sujetas al pacto PP-Cs están en Andalucía, como Sevilla o Málaga, donde se velan las armas aunque por el momento tampoco hay novedad.
