El congreso 'Retos interdisciplinares en el entorno de la Industria 4.0' que se celebra entre este lunes y martes, trata los cambios en las relaciones laborales que trae consigo la nueva revolución industrial y que conllevan riesgos para trabajadores y empresas, como las posibilidades de esquirolaje tecnológico para desactivar huelgas y el potencial de deslocalización que implica el trabajo, pero también oportunidades para regular nuevas profesiones y para conseguir una tributación más justa.
"La Industria 4.0 ha venido para quedarse. Las nuevas formas de desarrollo productivo demandarán cambios estructurales en la configuración del ordenamiento laboral, especialmente en la identificación del trabajador", explica el catedrático de Derecho del Trabajo, Ángel Arias.
Además, señala que "el trabajo tal y como se ha conocido tras el advenimiento de la Revolución industrial ha muerto. Las nuevas formas de trabajo demandan un marco jurídico distinto" para las relaciones laborales en las empresas posmodernas, que prevee "igual de deshumanizadas que la empresa clásica".
Uno de los debates que aborda el congreso es el de cómo revertir el impacto fiscal de la sustitución de trabajadores por autómatas. Para Arias "gravar con impuestos a los robots no es una quimera, es una oportunidad que debe ser abordada, cuanto antes mejor".
"De ser necesarias estas medidas fiscales y sociales, son varias las propuestas alternativas que se barajan: un impuesto único en función del valor (como el actual impuesto especial sobre vehículos), un impuesto sobre la renta imputada del trabajador al que sustituya el robot, o un impuesto a la automatización en función de los beneficios empresariales y el número de empleados", añade otro de los ponentes, el abogado Domingo Núñez, quien también reseña que hay también expertos que sostienen "que esa tributación por el empleo de robots tendría un efecto adverso de desincentivar su adquisición, lo que sería contrario a la mejora de la productividad y al desarrollo tecnológico".
Una de las mesas redondas que se celebra este martes en el marco del congreso la modera el decano del Colegio de Graduados Sociales de la Región de Murcia, José Ruiz, quien vaticina que la nueva revolución industrial "va a intensificar una tendencia a la progresiva reducción de las plantillas en el sector secundario, en parte debido a la creciente automatización de este, y por otro lado, la deslocalización de la mano de obra en el sector servicios, debido a la posibilidad de realizar la prestación laboral de forma remota", pero al mismo tiempo pide "no caer en el derrotismo" dadas las oporunidades que las nuevas tecnologías generan para el desarrollo de nuevas profesiones.
En definitiva, "la creación y destrucción de empleos es inherente a todo cambio productivo", como argumenta el también ponente del congreso Antonio Sempere, magistrado del Tribunal Supremo, quien en su intervención expone las nuevas tendencias laborales, como el teletrabajo, recordando que "es inherente al trabajo por cuenta ajena que la empresa asuma los costes de infraestructura".
En el congreso participan buena parte de los investigadores de la Universidad Politécnica de Cartagena, la Universidad de Murcia, la Universidad Rey Juan Carlos, la Universidad de Extremadura y la Universidad a Distancia de Madrid que firman el libro de reciente publicación ‘El impacto de la Industria 4.0 en el trabajo: Una visión interdisciplinar’.
En este trabajo se advierte de que el potencial económico de la transformación digital que caracteriza la cuarta revolución industrial, conocida como Industria 4.0, puede generar también profundos cambios en las relaciones laborales y afectar negativamente a los derechos de los trabajadores.
Este proyecto está financiado por la Comunidad Autónoma a través de la convocatoria de Ayudas a proyectos para el desarrollo de investigación científica y técnica por grupos competitivos, incluida en el Programa Regional de Fomento de la Investigación Científica y Técnica (Plan de Actuación 2019) de la Fundación Séneca-Agencia de Ciencia y Tecnología de la Región de Murcia.
