Rentable y sostenible. Así es Atkina ('luz', en griego), el nuevo vehiculo de inversión impulsado en la Región de Murcia por cuatro economistas y abogados de reconocido prestigio: José Luis Gallego, Antonio Grimaldi, Fran Fuentes; y Juan María Soler. Los tres primeros, socios fundadores del conocido despacho GGF; el último, impulsor de Avanza Capital Family Office, una de las principales Empresas de Asesoramiento Financiero (EAF) murcianas.
Atkina nace para financiar proyectos de economía verde, principalmente instalaciones fotovoltaicas para pymes, logrando un doble objetivo: por un lado, contribuir a la sostenibilidad y a la descarbonización de la economía murciana; y por otro convertirse en una apuesta rentable y segura para los inversores.
La mecánica de funcionamiento es sencilla: son muchas las empresas que ya han acometido la transición energética hacia las renovables, pero todavía quedan muchas más por completar este camino. En muchos casos, las empresas no dan el paso adelante para no descapitalizarse o para no gastar su CIRBE. En estos casos, Atkina se configura como la mejor opción.
La nueva sociedad de inversión estudiará el caso y acometerá y financiará la instalación de paneles solares en las instalaciones de la empresa sin que ésta deba desembolsar ninguna cantidad. La compañía, que hasta ese momento pagaba una cuota por la potencia consumida a la empresa eléctrica, simplemente ‘redirigirá’ dicha cuota hacia Atkina, recibiendo además un descuento mensual considerable.
De esta forma, la pyme no ‘notará’ la inversión, sino que simplemente seguirá pagando su recibo mensual, que recibirá un descuento sustancial.
Los impulsores del proyecto estiman una rentabilidad mínima del 6,5% el primer año, y a dos dígitos en los años sucesivos. Se trata de una buena alternativa de inversión ante el escenario actual de tipos de interés negativos, al protegernos de la inflación con riesgo ajustado.
Para garantizar la seguridad del inversor, se realizarán cribas a tres niveles para analizar la solvencia del proyecto. Además, Atkina ha alcanzado acuerdos con tres empresas murcianas de contrastada calidad para la instalación de las placas: Konery, Trexcom y Sunconnection Worldwide.
Atkina ha fijado el ticket mínimo de ingreso en la sociedad en 50.000 € con el objetivo de alcanzar los 6 M€ de capital para acometer al menos una treintena de proyectos. El precio de cada título se fija en 1.000 €, de los que 50 irán destinados al valor nominal de cada acción y 950 € de prima de emisión, de manera que la mayor cantidad de dinero esté disponible para la inversión.
El vehiculo de inversión prevé que tanto las distintas entidades financieras como la SGR de la Región, Aválam, participen en el proyecto, financiando alrededor del 40% de cada instalación. Esto permitirá que Atkina pueda acometer más operaciones, diversificando el riesgo y amplificando la rentabilidad.
Fuentes, Grimaldi, Gallego y Soler presentaron Atkina a una primera selección de inversores el pasado jueves en el Agalia, en un evento que resultó todo un éxito y refrendó el poder de convocatoria y la solvencia que el capital concede a sus impulsores.
De hecho, estuvieron presentes entidades financieras como Caixabank (en la figura de su directora territorial Olga García), Cajamar (José Antonio Chumillas, director de RR II), Banco Sabadell (Carmelo Vera), SCH o Bankinter, así como importantes empresarios y directivos como José Ángel Pardo (Liwe), Carlos Recio (Portavoz), Nacho Martínez (Embargos a lo Bestia), Fran Maza (Grupo Maza), Alfonso Carrasco (4GL) o Martín Izquierdo (Grupo Fuertes).
También hubo importante apoyo institucional y de las asociaciones empresariales, encabezadas por Joaquín Gómez (director del Info), los diputados Ramón Sánchez-Parra y Miriam Guardiola, además de José María Tortosa (Amefmur), Antonio López (Adimur), Ginés Ángel García (AJE), o Ramón Madrid, Patricio Rosas y Marcos Antón Renart (Colegio de Economistas).
El proyecto dejó patente la ilusión y el interés que genera entre los inversores. Atkina ahora se dispone a seguir creciendo con paso firme, teniendo la rentabilidad sostenible por bandera.