Aválam, la sociedad de garantía recíproca de la Región de Murcia, ha recibido en solo tres días 211 solicitudes por un importe de 26,15 millones de euros para reflotar la liquidez de pymes y autónomos. El nuevo escenario económico existente, resultado de la crisis sanitaria provocada por la pandemia de la COVID-19, ha multiplicado las demandas de este tipo de préstamos en los últimos días, según han indicado los responsables de la SGR murciana.
En una semana se han recibido la mitad de solicitudes respecto al año anterior y un 37% sobre el total del importe (en 2019: 417 solicitudes y 70,62 millones de euros). Por este motivo, la SGR ha reforzado su sistema electrónico y reorganizado su personal para atender este aumento de solicitudes. La cantidad total gestionada durante el mes de marzo ha sido de 34,24 millones de euros para 273 propuestas.
Aválam, en colaboración con CROEM, el Gobierno regional y varias entidades bancarias, ha relanzado esta nueva línea de financiación, que cuenta con hasta 250 millones de fondo, para adaptarla a la nueva situación generada por la crisis del coronavirus y permitir así que autónomos, pymes y micropymes de la Región de Murcia puedan financiarse con estos avales en las mejores condiciones.
Para ello, se ha considerado fundamental reorientar las condiciones de la financiación con el objetivo de inyectar liquidez de forma urgente al tejido productivo de la Región de Murcia. De hecho, tanto autónomos como empresas no tendrán que hacer frente a ningún tipo de interés ya que la línea se ha lanzado a coste 0 al estar íntegramente subvencionado por el Instituto de Fomento de la Región de Murcia (Info).
Desde Aválam se ha informado que todo el equipo continúa con su labor al cien por cien, incrementando las prestaciones a las empresas que lo necesiten, mediante el teletrabajo del 90% de su plantilla.
La SGR ofrece, desde el pasado viernes 27 de marzo, a todas las empresas la posibilidad de acceder a esta línea de financiación. Las empresas podrán solicitar un importe de entre 30.000 y 250.000 euros, con un plazo de amortización entre 3 y 5 años, pudiendo añadir un año de carencia opcional.
Como requisitos iniciales para acceder a la línea de financiación, hay que estar al corriente con todas las administraciones públicas y no estar en situación concursal o inscritos en algún listado de incidencias.