lunes. 25.11.2024

Los cursos de formación relacionados con la industria alimentaria, los de actividades deportivas y físicas, y los de hostelería y turismo son actualmente los de mayor salida laboral para los desempleados de la Región de Murcia, según refleja el último estudio ‘Inserta’ del Servicio Regional de Empleo y Formación (SEF) que pone en relación las acciones formativas para personas sin empleo a lo largo de 2017 y su posterior acceso al mercado de trabajo.

 

El índice de inserción de estas familias profesionales es superior al 60%, muy por encima del dato general, que pone de manifiesto que, globalmente, el 45,6% de los desempleados que completaron un curso de formación del SEF el año pasado fueron contratados en los siguientes seis meses.

El consejero de Empleo, Universidades, Empresa y Medio Ambiente, Javier Celdrán, presentó estos datos, y destacó que “en ocasiones existe la tendencia de afirmar que la formación para el empleo cae en saco roto, pero los datos demuestran que eso es falso porque una proporción muy elevada de alumnos comienzan a trabajar tras realizar una acción formativa. Es decir, la formación se está consolidando como un factor crucial para regresar a un mercado cada vez más exigente”.

 

La familia profesional que ‘absorbe’ actualmente a una mayor proporción de los formados en esa rama es la de la industria alimentaria, con un 62,7% de inserción, a través de cursos como los de ‘Carnicería y elaboración de productos cárnicos’, ‘Manipulador de alimentos’, o ‘Envasado y empaquetado de productos alimentarios’.

 

En el caso de las actividades físicas y deportivas (62,6% de contratados), algunos cursos cuya inserción destaca especialmente son los de ‘Socorrismo en instalaciones acuáticas’, ‘Acondicionamiento físico’ o ‘Animación físico-deportiva’. Por su parte, Hostelería y Turismo presenta una inserción del 56,2 por ciento, con cursos como los de ‘Operaciones básicas de cocina’, ‘Servicios de restaurante’ o ‘Sumillería’.

 

El estudio ha medido la inserción de los 5.708 alumnos que finalizaron una acción formativa del SEF a lo largo de 2017. De esa cifra, un total de 2.602 encontraron un empleo en el tramo de seis meses inmediatamente posteriores a la fecha de conclusión del curso. Por tanto, el estudio ha tenido en cuenta los datos de contratación hasta el primer semestre del presente año.

 

Uno de los principales aspectos que pone de manifiesto el informe es que el colectivo en el que más eficaz resulta la formación es el de jóvenes menores de 30 años. El 52,7% de jóvenes que realizaron un curso del SEF en 2017 encontraron empleo en los seis meses siguientes. El porcentaje baja hasta el 49,3% para el tramo de 30 a 44 años, y hasta el 34,5% para los mayores de 45 años.

 

Además, los hombres encuentran más fácilmente un puesto de trabajo (el 47,8%, frente al 43,2% de mujeres). El tiempo en desempleo también es un factor directamente relacionado con la inserción posterior, así, las personas que hicieron un curso cuando llevaban un año o menos en paro fueron las que presentaron un mejor dato de inserción laboral posterior (51,8%), seguidas de las que llevaban entre uno y dos años en paro (44,3%) y finalmente las que llevaban más de dos años sin trabajar (28,9%).

 

Por tanto, estos datos indican que el perfil actual de alumno que encuentra empleo con mayor facilidad tras completar un curso del SEF es un varón menor de 30 años que acumula menos de un año en desempleo.

 

La probabilidad de encontrar empleo tras hacer un curso para la obtención de un certificado de profesionalidad es mayor que cuando la acción formativa no da acceso al mismo. Así, en estos cursos (que son la mayoría en el SEF) la cifra de inserción se eleva hasta el 48,9%, es decir, 3,3 puntos más que el dato general. Los certificados de profesionalidad son titulaciones con validez en todo el ámbito nacional y representan acreditación suficiente para el desempeño de una profesión.

Los cursos sobre deporte y alimentación tienen una inserción laboral superior al 60%