La consejería de Agricultura de la Región de Murcia ha aprobado la convocatoria para la concesión de las ayudas de hasta 80.000 euros, dirigidas a entidades locales y municipios de menos de 100.000 habitantes, que vienen recogidas en el Plan de Impulso al Medio Ambiente (PIMA) Cambio Climático. La cantidad total asignada por cada uno de los proyectos será del 90% del presupuesto subvencionable, IVA excluido. El presupuesto total asciende a 342.819 euros.
Las subvenciones tienen como objetivo implementar actuaciones que tengan principalmente como finalidad contribuir a la adaptación al cambio climático en el espacio urbano y periurbano, potenciando las sinergias entre las estrategias de adaptación y mitigación en la lucha frente al cambio climático.
La Región de Murcia cuenta con 43 municipios en los que habitan menos de 100.000 habitantes, todos menos Murcia y Cartagena, y aglutinan a un total de más de 825.000 personas. Estos son los municipios que podrán solicitar este tipo de subvenciones para llevar a cabo unos proyectos que deberán estar finalizados el 27 de octubre de 2024 como fecha límite.
Este PIMA se diseñó para facilitar las actuaciones en las ciudades que se recogen en el marco normativo del gobierno de clima y energía, el proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética, el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático y el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima.
La Comunidad Autónoma, mediante acuerdo del Consejo de Gobierno, aprobó el 4 de junio de 2020 la Declaración Institucional de Emergencia Climática, y el 11 de junio la Estrategia Regional de Mitigación y Adaptación al Cambio Climático, que contempla, entre sus dos grandes objetivos el reducir o compensar en un 26%, en el horizonte de 2030, las emisiones de gases de efecto invernadero de los sectores de la economía no obligados al comercio de derechos de emisión y, al tiempo, hacer que la Región sea menos vulnerable al cambio climático.
Algunas de las medidas que se llevarán a cabo tendrán como objetivo la integración del cambio climático e infraestructura verde en la planificación y gestión urbanística, la adaptación de edificios públicos para prevenir el exceso de calor y mejorar la eficiencia energética o el aumento de la biodiversidad urbana y la mejora de los hábitats de estas zonas.