Nací en el seno de una familia donde la combinación de unidad y lucha han sido y son las piezas claves aprendidas para el trabajo diario. Sin lugar a duda… un orgullo. He crecido viendo cómo mi padre y sus hermanas mantenían y reforzaban el negocio fundado por mi abuelo. Una empresa que me enseñó a forjar la que es hoy en día mi forma de vivir y un estilo de vida que, junto a mis hermanos y primos, decidimos crear para hacer que esta tercera generación de Fornet sea la encargada de consolidar y hacer crecer el espíritu empresarial y familiar del negocio.
Mantener este legado es un privilegio, pero también -hay que reconocerlo abiertamente- una enorme responsabilidad. Hay que trabajar para mantener la esencia de lo que fue, pero sin olvidar dónde estamos, con quién y a dónde queremos ir. No es tarea fácil, al igual que tampoco lo es ser empresaria.
La unidad y la lucha conjunta en la que crecí me dieron la valentía suficiente para afrontar el negocio familiar y para hacer frente a un nuevo reto: la soledad en la toma de decisiones. Ser empresaria es un reto enorme. Son muchas las situaciones a las que enfrentarse, muchas las decisiones que tomar y, sobre todo, muchas las personas que pueden verse perjudicadas o beneficiadas de nuestras acciones. La empresa familiar es un eslabón fundamental e indispensable del tejido empresarial nacional.
¿Quién nos enseña a ser empresarias? No hay facultad ni escuela a la que poder asistir para aprender las claves de esa compleja tarea. El emprendimiento es una carrera de fondo y un estilo de vida que requiere de valentía, esfuerzo y de una formación constante.
Mi experiencia y las carencias detectadas en la empresa familiar en la que crecí me hicieron adentrarme en otra iniciativa empresarial centrada en el asesoramiento, acompañamiento y ayuda de quienes, como yo, han visto en el emprendimiento un estilo de vida, una manera de vivir.
El continuo cambio que vivimos nos impide permanecer impasibles. Afrontar los negocios en soledad es ya cosa del pasado y contar con el apoyo de los mejores profesionales es fundamental para avanzar.
La situación social y económica que atravesamos por el coronavirus, sumada al -a veces complicado entorno laboral de la mujer- ha llevado a la Organización Murciana de Mujeres Empresarias, Directivas y Profesionales (OMEP) a poner en marcha una iniciativa para motivar y fomentar la ilusión y las ganas por emprender.
#SEmprendedora, en colaboración con el ayuntamiento de Murcia, es la campaña emprendida por OMEP que pone al servicio de las mujeres de la Región de Murcia el apoyo, la ayuda y el asesoramiento que muchas emprendedoras precisan para poder lanzar el negocio con el que siempre habían soñado.