Un total de 15 personas han conseguido superar con éxito el programa mixto de empleo y formación para mayores de 25 años ‘Atención sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales’, impartido por la Fundación Jesús Abandonado a personas en situación de riesgo o exclusión social de la Región de Murcia.
El certificado ha sido entregado por el director de Jesús Abandonado, Daniel López, junto al coordinador del Área Ocupacional y de Empleabilidad de la fundación, Ángel Redondo, en un acto que ha puesto punto final a nueve meses de formación teórico-práctica a los 15 alumnos, quienes han obtenido el certificado de profesionalidad de nivel 2 para la atención sociosanitaria.
El curso, que se ha desarrollado en colaboración con el Servicio Regional de Empleo y Formación de la Región de Murcia (SEF), cuenta con una duración de nueve meses y tiene como objetivo la inserción laboral de personas desempleadas mediante su cualificación profesional en alternancia con el trabajo efectivo y la práctica profesional.
“Durante todo la fase formativa las personas han contado con el apoyo de una formadora especialista en la materia sociosanitaria y una gestora del proyecto para resolver y tramitar sus expedientes, a fin de que la certificación obtenida cumpla con todos los requisitos para ser oficial”, ha explicado Ángel Redondo, quien ha recordado, también que “la formación ha contado con diversos módulos de la materia estudiada y una estancia práctica en centros donde aplicar los conocimientos aprendidos”.
Este programa, que consta de una formación teórica en el Centro de Empleo y Formación de Jesús Abandonado y de una parte práctica, “ofrece una atención integral desde el acceso al plan formativo hasta lograr la inserción laboral”, añade Redondo.
Todo el alumnado ha adquirido la competencia general de atender a personas dependientes en el ámbito sociosanitario en la institución donde se desarrolle su atención, aplicando las estrategias diseñadas por el equipo interdisciplinar competente y los procedimientos para mantener y mejorar su autonomía personal y sus relaciones con el entorno.
Los alumnos han recibido un total de 1.440 horas formativas a través de este programa cuyo profesorado ha tenido que “reinventar la formación”, según ha explicado Redondo, ante las dificultades añadidas por la pandemia de la COVID-19. “Todos los participantes fueron reubicados en nuevos puestos de trabajo efectivo una vez finalizó el periodo de confinamiento para poder adquirir la experiencia necesaria que garantice su incorporación al mundo laboral con garantías de éxito”.