El 62% de los trabajadores españoles reduciría su jornada laboral sin pérdida de sueldo y manteniendo la productividad, tal y como se busca con la instauración de la semana laboral de cuatro días, una iniciativa que el Gobierno está tratando de impulsar con la concesión de ayudas a las empresas que la instauren.
Además, y siempre según una encuesta realizada por InfoJobs, el 40% de los trabajadores rechazaría la medida si ello conllevara una reducción del salario, aunque fuera proporcional al número de horas recortadas.
Entre las principales razones para optar a esta medida destacan la conciliación con la vida laboral, mencionado por el 83% de los encuestados; la mejor organización con hijos o personas dependientes (78%), el incremento de la motivación (75%) y el poder trabajar las horas acordadas por contrato sin horas extras (64%).
En el extremo contrario, el aumento de la carga laboral y una menor desconexión digital son las derivas que los españoles consideran menos beneficiosas, con un 14% y un 12% de las menciones, respectivamente.
El Gobierno ha impulsado esta semana una iniciativa para conceder ayudas de hasta 150.000 euros a aquellas pymes industriales que reduzcan la jornada laboral de sus trabajadores como mínimo en un 10% durante 24 meses, sin reducir el sueldo.
La ministra de Industria, Turismo y Comercio, Reyes Maroto, ha confirmado este martes que se trata de un proyecto piloto "que ha sido muy bien acogido" y ha detallado que el Gobierno ya cuenta con algunas empresas que han mostrado su receptividad.
"Vamos a ver una vez que lancemos la convocatoria cuál es el volumen de pymes que solicitan esta ayuda y sobre todo analizar los resultados", ha asegurado Reyes Maroto, que cree que este programa piloto va a permitir "explorar nuevos modelos de relaciones laborales" y determinar si el Gobierno aborda "una política más ambiciosa" en este ámbito.