El 51,2% de los parados menores de 30 años que realizan un curso del Servicio Regional de Empleo y Formación (SEF) encuentra trabajo en los siguientes seis meses tras su finalización. El último estudio trimestral del SEF, que ha analizado la relación de las acciones formativas con los índices de contratación, pone de manifiesto que los jóvenes son el colectivo en el que estos cursos resultan más eficaces.
Concretamente, de los 3.112 jóvenes que completaron la formación entre el cuarto trimestre de 2017 y el tercero de 2018, último periodo estudiado, 1.594 fueron contratados dentro de los seis meses siguientes a la finalización. Tras este colectivo, el siguiente tramo de edad con mejor índice de contratación es el de 30 a 44 años, con una inserción del 47,1% (2.253 alumnos participantes y 1.062 contratados).
Por su parte, el dato desciende hasta el 35,2% para las personas mayores de 45 años, que son las que encuentran más dificultades para acceder al mercado laboral (1.839 alumnos, de los que fueron contratados 647).
En relación a estas cifras, el consejero de Empleo, Investigación y Universidades, Miguel Motas, destacó que “la formación es una piedra angular dentro de las políticas activas de empleo y está directamente relacionada con el empleo de calidad, porque obtener una adecuada cualificación y seguir actualizando esas competencias en el futuro hace más probable que la empresa quiera alargar y estabilizar esa relación laboral”.
El SEF midió por primera vez la inserción de sus alumnos en el tramo que abarcaba el tercer trimestre de 2014 y el segundo trimestre de 2015. Dicho periodo reflejaba una inserción laboral del 47,3% de los alumnos menores de 30 años, por lo que desde entonces ese dato se ha incrementado en 3,9 puntos.
Además, los hombres encuentran más fácilmente un puesto de trabajo (el 48,5%, frente al 43 por ciento de mujeres), y el tiempo acumulado en desempleo también se revela como un factor directamente relacionado con la inserción posterior. Así, las personas que hicieron un curso cuando llevaban un año o menos en paro son las que registran un mejor dato de inserción laboral posterior (51,4%), seguidas de las que llevaban entre uno y dos años en paro (40,6%) y finalmente las que llevaban más de dos años sin trabajar (29%).
Por tanto, estos datos reflejan que el perfil actual de alumno que encuentra trabajo con más facilidad tras completar un curso del SEF es un varón menor de 30 años que acumula menos de un año en desempleo.
CURSOS CON MAYOR CONTRATACIÓN. La familia profesional en la que se contrata a día de hoy a una mayor proporción de los formados en esa rama es la de la química, con un 74,5% de inserción, a través de cursos como los de ensayos microbiológicos y biotecnológicos, los de operaciones básicas en planta química, o los de ensayos no destructivos, principalmente impartidos por el Centro de Referencia Nacional de Química en Cartagena.
A continuación le siguen la familia de las actividades marítimas y pesqueras (69,6% de contratados), la energía y el agua (66,1%) y la fabricación mecánica (65,9%).
El dato de inserción general de alumnos del SEF tras un curso para desempleados es del 45,8%, si bien la formación que conduce a un certificado de profesionalidad llega a un 48,2% de contratados.