La Región de Murcia ha ganado 13.112 afiliados a la Seguridad Social mayores de 45 años en los últimos doce meses, lo que supone una subida del 6,3%, y la sitúa por encima del aumento medio en España durante el mismo periodo (5,47%). Estas personas presentan mayores dificultades para la inserción laboral, y en muchos casos los desempleados de este colectivo son también parados de larga duración.
A día de hoy, el número de afiliados a la Seguridad Social mayores de 45 años son 221.158, mientras que doce meses atrás eran 208.046. Además, la Región está ganando trabajadores en este tramo de edad a mayor ritmo que en el conjunto de la población. Así, si el dato general de subida de la afiliación en el último año es del 4,26%, entre los mayores de 45 años el incremento es dos puntos superior.
En el último año, la Región de Murcia ha ganado 82 trabajadores al día, y los datos reflejan que 36 de ellos han sido mayores de 45 años, por lo que este colectivo está teniendo un protagonismo principal en la actual recuperación de empleo.
En lo referido al paro registrado, las oficinas del SEF registran actualmente 50.334 desempleados de más de 45 años, una cifra que representa el 45,77% del total de 109.949 parados registrados en la Región de Murcia a la conclusión de octubre.
El director general del SEF, Alejandro Zamora, destacó que “la recuperación económica también está teniendo un efecto positivo en el empleo para los mayores de 45 años, dentro de las mayores dificultades que enfrenta este colectivo para encontrar un trabajo. Hablamos de generación de empleo, de puestos de trabajo, de personas que ahora contribuyen al mantenimiento del Estado de bienestar, y eso es fundamental”.
AYUDAS ESPECÍFICAS. La Estrategia por el Empleo de Calidad 2017-2020 centra su atención en determinados colectivos con especiales dificultades de acceso al empleo, entre los que se encuentran los mayores de 45 años. Para fomentar su inserción laboral se destinan medidas específicas, como las ayudas a empresas para su contratación, las ayudas para el establecimiento como autónomos, la formación adaptada a su situación, o la participación prioritaria en programas de empleo.
Así, por ejemplo, estas personas cuentan con ayudas para el establecimiento como autónomos que van de los 3.000 a los 9.000 euros, dependiendo de la inversión inicial que lleven a cabo en inmovilizado material para su nuevo negocio, y de si, por ejemplo, también son parados de larga duración.
Durante 2017 se realizan, además, cursos específicos para unos 550 desempleados de larga duración mayores de 45 años. Esta formación se diferencia de los cursos habituales para desempleados en que cuenta con acciones de acompañamiento complementarias, como por ejemplo talleres, prácticas, seminarios o tutorización individualizada.
Igualmente, el SEF activó este año ayudas de entre 3.000 y 9.000 euros a empresas que hicieran un contrato indefinido a tiempo completo o parcial a personas de determinados colectivos, entre los que se encontraban los parados de larga duración de 45 años o más.
