El Ministerio de Defensa ha seleccionado a la empresa Abengoa, una de las dos mercantiles que optaban para implantar el Sistema de Propulsión Anaerobia (AIP, en sus siglas en inglés) de los submarinos de la serie S-80, que se construyen en Cartagena, informaron fuentes de Navantia.
Tras el cierre del casco resistente del primer submarino de la clase, el S-81 Isaac Peral, este programa ha resuelto el concurso para decidir si Abengoa o Técnicas Reunidas llevaba a cabo la colocación del AIP en los nuevos sumergibles.
Los submarinos convencionales requieren realizar operaciones de snorkel diarias para recargar sus baterías con motores diésel, lo que les hace vulnerables a la detección y ataque.
El Sistema AIP minimizará esta indiscreción al recargar las baterías del submarino en inmersión con una pila de combustible, que emplea hidrógeno producido mediante procesado de bioetanol y oxígeno para generar energía eléctrica, permitiendo navegar al submarino semanas sin salir a superficie.
Disponer de esta tecnología adaptada a las necesidades de una plataforma submarina en los plazos establecidos ha supuesto un reto para el Programa S-80. Para garantizar su éxito, el Ministerio de Defensa decidió encargar el desarrollo del procesador de bioetanol, unos de los elementos más complejos del sistema, a Abengoa Innovación y Técnicas Reunidas.
El primer submarino que dispondrá de este sistema operativo será el S-83, Cosme García, donde se embarcará en julio de 2021. Los submarinos S-81 y S-82, actualmente en construcción, serán reacondicionados en su primera gran inmovilización para dotarlos de este sistema.
El astillero de Navantia en Cartagena cerró el casco del primer sumergible de la serie (S-81) el pasado mes de diciembre, tiene previsto ponerlo a flote en octubre de este año y entregarlo a la Armada en diciembre de 2021.