El nuevo plan estratégico de Banco Sabadell contempla un ahorro de costes de 100 millones de euros de aquí a 2023, un objetivo que espera conseguir a través de diferentes vías, entre ellas un ajuste de plantilla.
El plan, que el nuevo consejero delegado, César González-Bueno, ha presentado este viernes a inversores y analistas, prevé que el Sabadell alcance una rentabilidad del 6% en 2023 y que para entonces el beneficio del grupo se sitúe sobre los 670 millones de euros.
"Estamos abocados a buscar la rentabilidad del banco por todas las vías, incluidas también medidas de revisión del número de personas que trabajan en él", ha explicado el primer ejecutivo del Sabadell en declaraciones a los medios.
González-Bueno considera "imprescindible" revisar la estructura de costes del banco y reconoce que una de las medidas a aplicar, pero no la única, será "el considerar salidas adicionales".
El Sabadell cerró en el primer trimestre de este año un plan para reducir la plantilla en 1.800 personas con prejubilaciones y bajas voluntarias, lo que le permitirá reducir los gastos de personal en 140 millones. Por lo tanto, aplicando una regla de tres, para recortar los gastos en otros 100 millones de euros, la entidad debería prescindir de unos 1.200 empleados. Su objetivo es tener una base de costes de 2.900 millones en 2023, frente a los 3.000 que registró a cierre de 2020.
El consejero delegado no ha detallado el alcance que tendrá esta nueva reestructuración de personal, pero ha señalado que el objetivo es impulsar las medidas de ahorro de costes en la segunda mitad del año para que estén ejecutadas a principios de 2022.
César González-Bueno ha asegurado que el nuevo plan estratégico es "realista" y transformador y que se sustenta en tres pilares básicos: el impulso de la banca de empresas, la mayor digitalización del negocio minorista y los buenos resultados que está empezando a cosechar TSB, la filial británica.